A solicitud de familiares de personas que padecen de hemofilia, este espacio dedicado a la educación y promoción de salud aborda esa enfermedad, porque al decir de muchos “no se sabe lo suficiente sobre esta” y, quienes la padecen, deben aprender a convivir con ella sin complicaciones, por los riesgos a los que se exponen ellos y sus descendientes.
Venceremos dialogó con Susana Llamos Martínez, especialista en Genética del Centro provincial de Genética Médica, quien explicó que la hemofilia es hereditaria y se transmite de abuelos a nietos. Las mujeres portadoras no padecen la patología, pero la transmiten al 50 por ciento de sus hijos varones.
Su principal síntoma es el sangrado por cualquier tipo de lesiones, y es causada por deficiencia de los genes F8 o F9 que producen los factores de la coagulación de la sangre, los cuales junto con las plaquetas se encargan de taponear la herida de los vasos sanguíneos.
En los casos más graves se presenta sin causa aparente: hemorragias internas de rodillas, tobillos, codos, “pero en los leves -aclara- no se advierten signos de la enfermedad hasta que la persona se somete a cirugía o sufre un traumatismo”.
Aconseja a los pacientes ganar en percepción de riesgo -dígase evitar golpearse o herirse- y saber actuar de inmediato para detener sangramientos, seguir disciplinadamente el tratamiento médico, chequearse con sistematicidad, y no automedicarse, sobre todo, con fármacos que contienen salicilatos (ibuprofeno, naproxeno, entre otros antinflamatorios no esteroides).
De igual manera, indica informar de su estado a estomatólogos, enfermeras… cada vez que acudan a una institución de Salud, llevar una alimentación saludable, y realizar ejercicios físicos sistemáticos, pues es primordial fortalecer los músculos y las articulaciones. No deben practicar deportes de contactos, entre otras actividades que puedan ocasionarles heridas o lesiones.
La doctora argumentó que ya existe el diagnóstico prenatal y la orientación oportuna sobre el protocolo a seguir en cada caso, y ante inquietudes pueden buscar asesoría genética en las áreas de Salud y en el centro provincial.
Padecerla no es obstáculo para vivir normalmente, siempre y cuando se cumpla con las regulaciones y tratamiento médico. Es imprescindible orientar, enseñar, educar y apoyar a los afectados desde edades tempranas de la vida, para que alcancen habilidades en el manejo de su condición y así evitar complicaciones innecesarias.
