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Robot humanoHiroshi Ishiguro sorprendió a todos en La Habana en la mañana del martes. Ingeniero en la Universidad de Osaka, en Japón, ha construido muchos robots a lo largo de su carrera. Pero sus últimas creaciones no son autómatas comunes, sino se asemejan a personas normales. Uno de ellos, incluso, es una versión androide de un hombre de mediana edad, él mismo.

El Geminoid HI-4 (nombre inspirado en la palabra latina para “gemelo”) es la cuarta generación de este androide hiperrealista.

Más allá de la ciencia ficción, escuchar a Ishiguro en la XVII Convención y Feria Informática 2018 permite vislumbrar un futuro no de fantasía sino de realidad y de preguntas complejas, directas y pertinentes que tenemos que hacernos como sociedad para encarar y aprovechar mejor estas tecnologías.

El experto japonés en inteligencia artificial, fundador de un laboratorio que lleva su nombre, está convencido de que los androides podrán servir a los humanos como socios para los negocios en el futuro.

De cara a los Juegos Olímpicos y Paralímpicos que se celebrarán en Tokio en 2020, estos robots podrían solucionar muchos problemas: “Pueden hablar fácilmente hasta 30 idiomas”, explicó Ishiguro.

El trabajo del profesor fue reconocido en 2015 con el Premio nacional de Ciencia y Tecnología que otorga el Ministerio nipón de Cultura, Deporte, Ciencia y Tecnología, del cual recibe en la actualidad toda la financiación necesaria para llevar a cabo sus proyectos.

En la actualidad está estudiando la interacción entre los seres humanos y los humanoides. Su objetivo es programarlos con intenciones, comportamientos y deseos, de manera que tengan características más parecidas a las de las personas.

“Las emociones son fáciles de compartir con todo el mundo (…), incluso si desconocemos el idioma. Es la forma más básica de comunicación. Por eso, es necesario que los robots también tengan emociones”, añadió.

Hiroshi Ishiguro también ha creado androides desde el 2000 como Erica, Elfoid, Telenoid, Kodomoroid y Otonaroid. Un aspecto por el que sus trabajos en robótica han impactado al mundo es porque buscan que los humanoides luzcan lo más similar posible a los seres humanos.