Los resultados preliminares de una reciente expedición al lugar donde un antiguo barco naufragó próximo a Cayo Zaza, en la costa sur espirituana, fueron expuestos por especialistas durante el Curso de Verano 2018.
Nuestra Señora de la Candelaria o San Carlos pudiera ser el nombre de la citada goleta, aunque aún existen dudas sobre el particular.
Orlando Álvarez de la Paz, jefe del Gabinete de Arqueología Manuel Romero Falcó en el territorio, explicó que un cañón de bronce, descubierto y extraído por pescadores en 2009, es la única pieza con un fechado externo (1777) a considerar.
Exhibe el sello del Rey Carlos III y el lugar de fabricación en Sevilla, España, y fue trasladado en su momento a Trinidad, ciudad Patrimonio Cultural de la Humanidad desde 1988, añadió.
Entre lo observado durante la expedición realizada en mayo último figuran, dijo, un ancla con un cepo de hierro próximo al pecio con una fecha posterior a 1780.
Además, ocho piezas de artillería y otras cuatro, que estaban bajo el manto de arena, ascendiendo a un total de 12 piezas.
Algunos de los buques que operaban en los años 80, del siglo XIX, como guardacostas entre Trinidad y Santiago de Cuba fueron el balahú San Carlos, la goleta Nuestra Señora de la Candelaria y otras tantas que cumplían su misión cerca de las costas trinitarias, aseguró.
Trabajamos en los avales de la Comisión Provincial de Monumentos en la presentación del proyecto y la solicitud de los permisos al Consejo Nacional de Patrimonio para hacer una nueva expedición a fines de este año o en el primer semestre del 2019, detalló a Prensa Latina.
Participaron en dicha exploración el Gabinete de Arqueología de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana y el Departamento de Arqueología de la Oficina del Conservador de Trinidad y del Valle de los Ingenios, argumentó.
También integrantes del Departamento de Estudios Ambientales del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente y el Gabinete de Arqueología Manuel Romero Falcó de la Oficina de Monumentos y Sitios Históricos del Centro Provincial de Patrimonio Cultural, agregó.
Las evidencias permanecen en el lugar cumpliendo con los protocolos internacionales y las disposiciones de la Subcomisión de Arqueología, la Comisión Nacional de Monumentos y el Departamento de Arqueología Subacuática del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, precisó.
Se respetó la integridad del naufragio y la exploración se dedicó a diagnosticar las condiciones en que se encontraba y su estado de conservación, puntualizó.
