Gracias por tu dignidad, gracias por tu rifle fiel,
por tu pluma y tu papel, por tu ingle de varón. Gracias por tu corazón.
Gracias por todo, Fidel.
Carilda Oliver
Hoy 29 de noviembre es el segundo y último día del homenaje póstumo que la ciudad de Guantánamo le rinde, en la Plaza de la Revolución Mariana Grajales, a nuestro eterno Fidel Castro; hoy, al igual que ayer, un mar de personas inundó el zócalo, bajo el ardiente sol de Oriente, para decirle adiós a ese que, como dijera Carilda Oliver en su Canto a Fidel, nos hizo hombres y cuidó los nombres que tiene la libertad.
Por eso estaban allí, el dirigente, la ama de casa, el trabajador, la estudiante, el niño…, ya fuere con la rosa que cogió en el jardín de la vecina, o con la lágrima que le fue imposible contener, o con el más humilde pensamiento de que descanse en paz y que continuaremos su legado; por eso el pueblo lo nombra, y lo honra.
Avanzar es el más digno homenaje a Fidel
Danilo Acosta Acosta, secretario general del Sindicato Agropecuario, Forestal y Tabacalero en la provincia de Guantánamo expresa, con visible consternación, que “la muerte del Comandante nos ha dejado un dolor muy fuerte en el alma, a pesar de esto haremos todo lo posible por multiplicar los esfuerzos y avanzar en cada una de nuestras tareas porque ese sería el más digno homenaje para recordarlo siempre”.
“Fue muy difícil creer que ya no estaba entre nosotros, quería pensar que sería eterno, pero lo traeré a la memoria siempre como un vencedor, un inspirador, faro de todos los cubanos; ahora nos queda seguir cada una de sus ideas, materializarlas y cumplirlas, porque Fidel dio todo por los trabajadores, y con la agricultura particularmente estuvo muy vinculado y luchó porque esta fuera sostenible”.
Cumplir la zafra es una manera más de honrarlo
“Esta pérdida creo es incomparable; se nos fue el padre, el guía, el iniciador de esta gran Revolución que ya cuenta con más de medio siglo, el hacedor de logros…”, así piensa Gustavo Yaunner Iglesias, uno de los que estaban allí con lágrimas en los ojos que le fue imposible contener.
Gustavo es jefe de Recursos Humanos en una Unidad Básica de la Empresa Azucarera, y dice que hay que reponerse y enfrentar con aptitud las labores que nos tocan.
“Mi desafío ahora es ser cada día mejor tanto personal como laboralmente, y lograr desde mi puesto de trabajo que nuestra unidad cumpla con la zafra, que es la más importante que tenemos en estos momentos, y luchar por mantener nuestra Revolución es mi mayor reto en lo adelante.”
Fidel se ha multiplicado en 11 millones de cubanos
La joven arquitecta Isabel Beatriz Delgado, trabajadora de la Empresa de Proyectos Agrícolas, comenta: “cuando recibí la noticia en la madrugada del sábado ese día fue un despertar muy difícil, pero algo me consuela: Fidel no ha muerto, se ha multiplicado en once millones de cubanos, y estamos comprometidos a rendirle homenaje”.
“Ahora demostramos el sentir de una generación que nació al calor de sus enseñanzas, de sus conquistas, de una batalla de ideas en la que fuimos nosotros, los jóvenes del presente, los protagonistas. Solo me queda prometerle que seguiré cumpliendo con mi Revolución, mantendré mis ideales, que fueron los suyos también, al precio que sea necesario, y que cambiaré, desde mis posibilidades, todo lo que tenga que ser cambiado”.
El Comandante seguirá siendo grande entre los grandes
Nereyda Durán Matos es médico general integral en el policlínico 4 de Agosto y cree firmemente, que gracias a Fidel ella, como muchos otros, ha concretado su sueño de ser médico; “él para mí lo es todo, aunque ya no esté físicamente su legado vive más que nunca en nosotros; los trabajadores de la salud seguiremos adelante y representándolo como él quería que fuese tanto en Cuba como en otros países”.
“Fidel para mí es paradigma de entrega, tesón, perseverancia; yo creo que fue un hombre perfecto y ese es el resultado de su humanidad, su preocupación por los hombres y la naturaleza; su lucha por la igualdad y por materializar el sueño de Martí de que esta, su Patria, su Cuba, fuera una sociedad con todos y para el bien de todos”.
¿Qué va a pasar de ahora en adelante?
Cuando Marlene Hernández Martínez, sodera en la heladería Coopelia de esta ciudad del Guaso, se enteró de la triste noticia de la partida física del Comandante en Jefe, le vino a su mente una pregunta: ¿Qué va a pasar de ahora en adelante?, pero ya sabía la respuesta, dice que ahora le toca reafirmar el concepto de Revolución; ser cada vez mejor con el cliente siendo espejo de la bondad que caracterizó a Fidel.
“Estoy muy triste, creo que es inevitable en estos días, pero lo recordaré como un buen presidente, buen líder, hermano, compañero…hombre; lo recordaré por regalarnos esta Cuba hermosa en la que vivimos, por regalarnos la salud, la educación, la cultura, la paz y la libertad, que es el bien más preciado que puedas tener un ser humano”.
