La Sociedad Cultural José Martí (SCJM) celebró con la gala Por la idea del bien, en el Teatro Mella el Día de la Cultura Nacional, el XX aniversario de esa institución y se sumó a la Campaña Mundial de Lucha contra el Cáncer de Mama.
Oni Acosta, director y conductor del espectáculo –la noche de este martes-, destacó que estaba dedicado a todos los martianos de la Isla y el mundo que trabajan por promover las obras e ideario del Maestro, en aras de que la paz reine en toda la humanidad y que los cubanos sigan siendo un pueblo de amor y esperanzas, de lucha y entrega.
Destacó que la SCJM se suma a la batalla contra, el cáncer, enfermedad que aqueja a millones de mujeres en el planeta y elogió la labor del proyecto Alas por la vida, que dirige Alexis Castro y realiza una encomiable labor de apoyo, solidaridad y por integración a la sociedad de las féminas víctimas de ese flagelo.
Rogelio Fundora, artista de la plástica, conocido como el Guajiro que pinta, obsequió a la SCJM un cuadro de gran formato con la imagen del Apóstol.
La nota fresca y humorística la velada la pusieron las integrantes de la Compañía Step by Step, de Berlín , Alemania, que se encuentra en La Habana por su trabajo conjunto con el Centro Memorial Martin Luther King Hijo, y que mediante la danza teatro crean coreografía de inspiración costumbrista como la referida e los macarrones hirviendo en agua, una visita al cine o un viaje en un transporte colectivo urbano.
Esta agrupación se sumó al homenaje al entregar varios obsequios a miembros de la directiva de la institución.
También actuó la solista Ivette Letucé, quien está integrada a la Campaña de Lucha Contra el Cáncer de Mama y ha donado varias de las canciones compuestas por ella para esa noble causa.
El Coro Diminuto , dirigido por la maestra Rosa López , interpretó el poema martiano La bailarina española y varias piezas emblemáticas de la música popular como La Ma Teodora, Mamá Inés y Yényere Gumá.
La Orquesta Charanga Juvenil del Conservatorio Alejandro García Caturla puso otra nota agradable a la noche al tocar con gran destreza y gracia varios de los danzones emblemáticos que atesora la cultura cubana.
El espectáculo concluyó con el cantante y compositor Cristian Alejandro con su grupo, quienes pusieron sabor juvenil de alegría con canciones compuestas por su líder.
En el vestíbulo de la sala, una pequeña exposición de los artistas Kamyl Bullaudy y Tato Ayress, rindió homenaje a íconos de la identidad criolla y al más universal de todos los cubanos.
Fuente: AIN