Dominar las características físicas del animal y aprender a descifrar hasta su estado emocional, influye positivamente en su desempeño deportivo.Ser atractivo y conquistador para el palomo en las competencias deportivas es insuficiente si desea enamorar a la hembra en pleno vuelo y llevársela, de primero, a su caseta. En ese momento necesita mostrarle que tiene las mañas adecuadas y capacidad física para perseguirla durante varias horas, imponiéndose a toda desaventura y rivales, igualmente, galanes y seductores que también participan en la suelta competitiva.

En el aire, los machos se disputan desenfrenados a la hembra como pareja de apareamiento; el que lo consigue también hace ganar al dueño el cetro dorado en la competencia de paloma deportiva, modalidad que hace dos años se realiza en Guantánamo y cuenta con más de 600 practicantes.

“Es una competencia de amor. Escogemos una hembra de cualquier palomar y le pintamos las alas de colores llamativos, principalmente rojo. Asimismo, seleccionamos a machos de varios criadores y los soltamos todos juntos desde un mismo punto de partida. Gana el que logre conquistarla”, explica Francisco Ramírez González, metodólogo provincial de Recreación Física.

“En la azotea de cada concursante espera un juez para precisar cuál fue el ave que consiguió ser el “Don Juan”. Para este tipo de práctica se pueden emplear diferentes especies de palomas, desde las mensajeras hasta las llamadas silvestres, aunque, por lo general, participan mayormente los buchones, esos que se llenan de aire el pecho”.

“La mensajera es la única que participa en eventos de velocidad, en que recorren hasta 350 kilómetros, medio fondo (entre 351 y 600 km), fondo (601 y 700 km) y gran fondo (más de 701 kilómetros), atendidos por la Federación Colombófila de Cuba, explica Ramírez González.

Existen, además, otras actividades independientes de las etapas competitivas, entre ellas, los colombódromos donde incursionan los pichones de 25 a 30 días de nacidos.

Igualmente con las mensajeras se celebran encuentros de exhibición, donde se concursa en las categorías sport y standard. En la primera se premia a las que promedian mayor kilometraje de vuelo durante dos años, y la segunda reconoce a la de mayor belleza y rendimiento deportivo.

Criar y adiestrar palomas requiere de mucha paciencia, y para quienes se dedican a ello lo primero es orientarse sobre el cuidado y manejo de estas delicadas aves. “En Guantánamo somos dos los centros vinculados al trabajo con las palomas: el departamento de Recreación Física del Índer y la Asociación de Colombófilos, perteneciente a la Federación.

“Para aclarar dudas de cómo entrenarlas o inscribirlas para participar en eventos competitivos pueden acercarse a ambas asociaciones; no obstante, adelanto que no hay límites de edad ni sexo para formar parte de esa gran familia, con más de 116 años de haberse establecido en el país”, refiere Ramírez González.

El vuelo

“Cuando convocan lides de carrera seleccionamos en la provincia alrededor de 600 palomas y las trasladamos en cajas hasta la sede de la competencia, que puede ser en el centro u occidente del país, en una ocasión nuestras aves regresaron volando desde Pinar de Río. Salieron a las ocho de la mañana y algunas llegaron a las cinco de la tarde.

“Digo algunas porque durante el vuelo, muchas quedan en el camino, se pierden, mueren de cansancio o en accidentes al chocar contra cables eléctricos o paredes, mientras otras son sacrificadas por cazadores furtivos, gavilanes y halcones peregrinos.

“Es digno reconocer el esfuerzo y sacrificio de las aves para llegar nuevamente a casa, por el amor que sienten hacia el palomar y la persona que las atiende”, precisa Francisco, quien resalta la capacidad de orientación de estas especies, que viajan con un anillo de identificación en una pata.

Ese anillo que les colocan jueces y dueños a las palomas lleva el nombre o número del ejemplar, año de nacimiento y federación u organización a la cual pertenece. “Las informaciones permiten conocer a las triunfadoras y dan la posibilidad de devolverlas en caso de extravío”.

“Preparados seremos capaces de incentivar el amor e interés de los jóvenes por esta especialidad”, abunda Francisco.

Enigmas

Para triunfar en el trabajo con palomas, asegura Francisco, “es tan imprescindible la calidad del ave como el manejo, alimentación y salud. Y aunque parezca increíble es necesario establecer conexión entre el dueño y el ejemplar.

“Hay que dominar sus características y aprender a descifrar hasta su estado emocional, lo cual influye en su desempeño deportivo. Los dueños deben mantener la calma, pues el éxito en esta práctica está en la paciencia, fusionada con el responsabilidad y la exigencia para con ellas”.

“El entrenamiento comienza en el palomar, de ahí se suelta y se les llama con chiflidos o palmadas para que retornen. Eso debe realizarse diariamente hasta que el ave aprenda a identificar su hogar, porque de golpe no las puedes soltar. Ella primero debe reconocer la comarca y así sucesivamente hasta que esté en condiciones de alejarse”.

También explica que similar a los atletas las palomas luego del desgaste físico requieren descanso y buena alimentación. Se recomienda que para recuperar las energías deben consumir granos y semillas ricos en calorías, grasas, proteínas y fibras, pues de lo contrario solo estaría estimulando la creación de toxinas e impurezas.

Para completar la buena calidad de vida de la paloma es primordial la higiene de la caseta, que se sugiere sea construida en un espacio de un metro cúbico aproximadamente y, de no tener el espacio disponible, se recomiendan lugares pocos hacinados, con buena ventilación, seco y factible para limpiar.

“Cuando están todas apretadas aumentan las probabilidades de enfermar, pues es mayor el número de excrementos, y por tanto la sobrepoblación de moscas y larvas que se alojan en la piel de los pichones hasta matarlos”, explica y resalta el esmero que debe tenerse con la cría y las adultas, las cuales precisan de atención veterinaria periódicamente.

Según especialistas, descuidar la higiene de los palomares incide en la proliferación de enfermedades silenciosas e infecciosas, además de los piojos y garrapatas. Las plumas y excrementos transmiten hongos, bacterias y parásitos afectando principalmente a las personas inmunodeprimidas. “Por ello insistimos en mantener limpias las casetas y regarles cal sistemáticamente”.

Dice Francisco que anhela potenciar y hacer extensiva esta actividad por toda la provincia; “Impartiremos en diciembre un seminario integrador con el cual capacitaremos a los profesores como árbitros, tutores y jueces. Bien preparados seremos capaces de incentivar el amor e interés de los jóvenes por la especialidad con la cual aspiramos a minimizar las competencias ilegales de palomas, abusiva práctica a la que es sometida esta ave símbolo de inocencia y paz”.