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venezuela opositor díalogoEmpeñada en acceder al poder por vías inconstitucionales, la oposición venezolana desoye hoy los constantes llamados al diálogo realizados por el gobierno de Nicolás Maduro.

El diputado a la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) Adán Chávez Frías, precisó que una vez más los partidos de la burguesía intentaron sabotear la mesa de conversaciones instalada en República Dominicana, con el fin de descartar la diplomacia de paz como herramienta para la solución de los conflictos.

En artículo publicado por la Agencia Venezolana de Noticias, Chávez Frías indicó que con su negativa, la derecha demostró sus intenciones de apostar por la violencia política como arma para desestabilizar el sistema democrático en la nación sudamericana.

Prueba de ello fue la burda manipulación llevada a cabo por la oligarquía nacional de la operación de seguridad contra una célula terrorista que amenazaba con sembrar el caos, con el único fin de descalificar al Estado venezolano.

Tal actitud pone en evidencia una vez más el doble rasero del imperialismo en la llamada "lucha contra el terrorismo", que le sirvió de excusa a Estados Unidos para atropellar impunemente a naciones como Afganistán, Libia, Iraq, entre otros, indicó el diputado constituyente.

Mientras, el gobierno bolivariano y el pueblo apuestan por el diálogo con el acompañamiento de la comunidad internacional, y estamos seguros que el país saldrá airoso en esta propuesta, aseguró el político venezolano.

En la misma línea de análisis, el director del diario Últimas Noticias, Eleazar Díaz Rangel, recordó que desde los días posteriores al golpe de Estado contra el comandante Hugo Chávez en 2002, la Revolución bolivariana siempre abogó por la vía diplomática para resolver las diferencias con la oposición.

Sobre la malograda última convocatoria al proceso de negociación, la cual debió celebrarse el 18 de enero último en Santo Domingo, el analista hizo referencia a 'poderosos factores externos' y pretextos de la oposición para ausentarse de la misma.

En efecto, la supuesta presión ejercida por los gobiernos de Estados Unidos, España y Colombia dio al traste con la posibilidad de profundizar en los puntos incluidos en la agenda de las negociaciones y llegar a un acuerdo para la convivencia pacífica, indicó Díaz Rangel.

Analistas políticos estiman que la oposición juega por una parte a dilatar los diálogos de paz con el gobierno de Nicolás Maduro, mientras por la otra apuesta abiertamente por la violencia y la guerra económica para derrocar a la Revolución bolivariana.

A pesar de esa burda estrategia de desestabilización, el Estado venezolano mantiene su disposición y voluntad para continuar con las conversaciones instaladas en la capital dominicana.

Al comparecer ante la prensa el 18 de enero último, el jefe de la delegación gubernamental a las pláticas, Jorge Rodríguez, dijo que las autoridades venezolanas jamás se negarán a dialogar con los partidos opositores, pues lo más importante es la paz y la convivencia entre venezolanos.

En tal sentido, Rodríguez ratificó el compromiso de convocar en los próximos días una nueva fecha para continuar el diálogo en República Dominicana en el interés de una salida pacífica y estable para Venezuela.