Era de esperar que si con las maravillosas impresoras en 3D se pueden hacer tantas cosas que hace poco no eran imaginables, le tenía que llegar el turno creativo por ese novedoso procedimiento a la vivienda, y ya se ha comenzado a levantar las primeras.

La primicia corresponde a los Países Bajos, que pronto tendrán el primer «barrio impreso» del mundo.

Los artífices del distrito, cuyos edificios se alzarán con una impresora 3D, son especialistas de la Universidad Tecnológica de Eindhoven que también hicieron realidad el primer puente 3D para ciclistas en la localidad de Gemert hace un año, informa Huffington Post.

El primer edificio estará listo para ser habitado a mediados del año que viene. Y en 2023, según sus promotores, cinco enormes construcciones grises se alzarán contra el cielo como si de las rocas del Stonehenge se tratase.

El proyecto, bautizado como Project Milestone, nace de la colaboración entre la Universidad Tecnológica de Eindhoven, el propio municipio neerlandés y cuatro empresas. Se usará una impresora 3D para arrojar las capas de cemento necesarios para forjar las paredes de los cinco edificios.

Los trabajos se realizarán primero en el laboratorio de la Universidad y posteriormente, si se logra adaptar la tecnología a las condiciones del clima neerlandés, en el barrio de Meerhoven.

Según algunos expertos, si este ensayo resulta exitoso, podríamos encontrarnos ante una revolución de las técnicas de construcción, que serían más rápidas, económicas y ecológicas.