El presidente venezolano, Nicolás Maduro, denunció intentos de agresiones por parte de bandas criminales contra efectivos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana durante las elecciones legislativas realizadas el pasado domingo, difunden hoy los medios locales.
A través de la estatal Venezolana de Televisión, el mandatario aseguró que tiene pruebas sobre la contratación y el pago en dólares a grupos armados para asesinar personas días antes de los comicios y en la jornada de la consulta a fin de generar el caos.
Maduro explicó que una de las bandas iba a lanzar una granada contra unos soldados en un centro de votación, pero el arma explotó cuando estaba en poder de los atacantes.
También recordó que en las semanas previas a las elecciones siete personas murieron al intentar cortar cables para privar del servicio eléctrico a grandes sectores de la población y generar el descontento en circuitos claves.
Además, el mandatario expresó su rechazo a la violencia y abogó por hacer cumplir a los criminales ante la justicia.
En tal sentido, se opuso a la iniciativa de la derecha venezolana (que obtuvo 112 de 167 escaños del Parlamento) sobre una ley de amnistía para los llamados presos políticos, entre quienes figura el dirigente opositor Leopoldo López, condenado a más de 13 años de prisión por su responsabilidad en manifestaciones violentas ocurridas en 2014 durante las cuales murieron 43 personas.
Según las autoridades venezolanas, en el país no existen presos políticos, sino políticos presos por crímenes contemplados en el código penal.
La oposición puede mandar mil leyes, pero los asesinos tienen que ser juzgados y pagar, enfatizó Maduro.
De acuerdo con el defensor del pueblo de Venezuela, Tarek William Saab, la nueva Asamblea Nacional deberá atenerse a sus facultades y a lo refrendado en la Constitución.
El funcionario explicó que la Asamblea no debe legislar en contra del principio conocido como progresividad de los derechos humanos, el cual establece que estos se mejoran o dejan igual, pero nunca se quitan o limitan.
Saab, también constituyente nacional (1999), precisó, además, que en el sistema venezolano existe un contrapeso entre los poderes del Estado.
Según la ley fundamental de la República, el Parlamento tampoco puede remover a otros poderes -incluso con el aval de la mayoría calificada- si no existe un pronunciamiento previo del Tribunal Supremo de Justicia, el Poder Ciudadano o la instancia establecida para el caso preciso, añadió.
