Los aspirantes demócratas estadounidenses, Hillary Clinton y Bernie Sanders, se enfrentan hoy en un debate en Miami, Florida (sureste), donde la exsecretaria de Estado supera por dos dígitos al senador por Vermont.

Sanders, tras su cerrada e imprevisible victoria en Míchigan, espera mejorar sus opciones en el estado del Sol brillante, donde la exprimera dama y exsecretaria de Estado Clinton lo aventaja por amplio margen en la puja por la boleta partidista para las elecciones presidenciales de noviembre.

El mensaje del senador debe estar dirigido a las minorías, afroestadounidenses y latinos, un voto que se inclina desproporcionadamente por la fémina, quien tiene, aparentemente, su talón de Aquiles entre los votantes blancos de clase trabajadora y los independientes.

Se espera que Clinton rediseñe su mensaje económico, el cual no parece llegar a los votantes de su partido, y Miami será el punto de partida para esto antes del comienzo de las primarias en el estado, y en otras zonas industriales que votan el 15 de marzo como Ohio e Illinois.

A favor de Sanders está que es el único candidato en la contienda que se opuso consistentemente a los acuerdos de libre comercio, algo que apoyó su victoria en Michigan, según analistas, y que puede ser determinante en los estados industriales que votan el 15 de marzo.