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El presidente de Guinea Bissau, José Mario Vaz, anunció que cesará al gobierno de Baciro Djá, imposibilitado de lograr hoy la aprobación en el Parlamento de su plan de Presupuesto General del Estado.

 

El Presidente 'nos comunicó que finalmente dimitirá este gobierno', dijo a reporteros Carlos Correia, exprimer ministro y vicepresidente del gobernante Partido Africano para la Independencia de Guinea y Cabo Verde (Paigc).

Vaz escucha a fuerzas políticas representadas en el Parlamento para nombrar a un nuevo primer ministro.

Según medios periodísticos, la designación deberá recaer en uno de los tres nombres propuestos por el jefe de Estado: Umaro Cissoko, Augusto Olivais o João Aladje Fadia.

Por segunda vez, el mandatario consulta a partidos con asiento parlamentario después de hacerlo a finales de octubre.

En la ocasión también escuchó a miembros de la sociedad civil y de confesiones religiosas.

Sobre procedimientos para escoger al primer ministro y por ende la formación de una administración de consenso, Vaz dijo recientemente que no es un proceso que dependa apenas del gobernante, sino también de las demás fuerzas vivas del país.

'El Presidente tiene un papel importante, más el proceso no depende solo de él, depende de todos los órganos de soberanía y de todas las partes implicadas en este proceso', precisó.

Los principales actores de la crisis política en Guinea Bissau alcanzaron un acuerdo el 10 de septiembre, con la creación de un nuevo Ejecutivo integrado por todos los representantes guineanos, parte de un plan de seis puntos diseñado por la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao).

Con el diálogo se pretendió el nombramiento de un primer ministro de consenso, formar un gobierno de unidad y restaurar en sus cargos a los 15 parlamentarios expulsados por el Paigc.

Tal trance provocó una indiferencia entre el Paigc y Vaz, quien en lo que va de año cesó y nombró a varios jefes de gobierno.

El Paigc responsabiliza al jefe de Estado por la existencia de un 'gobierno de iniciativa presidencial', figura no prevista en la Constitución y espera que deponga al equipo de Djá tal como hizo con el Ejecutivo liderado por Correia.

La crisis en Guinea Bissau comenzó el 12 de agosto de 2015, cuando Vaz dimitió como jefe de gobierno a Domingo Simoes (presidente del Paigc), al argumentar incompatibilidades personales y falta de confianza.

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