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maisi viveros cafeRolando Pérez Leyva, productor de Ovando, alista tres hectáreas de terrenos y prepara 12 mil posturas de café, en un vivero que creó con sus propias manos.

En materia de café, por lo menos en Maisí, la palabra recuperación no es sinónimo de cosecha.

 

El término indica, apenas, que los miles de árboles derribados por el huracán Matthew, en octubre de 2016, fueron retirados de encima del cafeto y ordenados en los terrenos; y ahora se colocan plátanos e higueretas que funcionan temporalmente como sombra, mientras crecen los árboles de piñón florido (júpiter) que cubrirán las plantaciones de manera permanente.

 

En tanto, se preparan 3, 9 millones de posturas necesarias para sembrar, en el transcurso del año 2018, unas 800 hectáreas (ha) de café arábigo.

 

A partir de esa fecha -aseguran los entendidos en el tema- los cafetos tardarán cinco años o seis en alcanzar buen rendimiento.

 

Justo ese tiempo habrá que esperar para que el municipio más oriental de Cuba vuelva a ser uno de los grandes polos productivos del grano en el país.

 

Primer orden

 

Rolando Pérez Leyva, productor de la localidad de Ovando, alista tres hectáreas de terrenos y prepara 12 mil posturas de café, en un vivero que creó con sus propias manos, a la espera de la próxima primavera, temporada idónea para la siembra.

 

Como él, 3 mil 200 caficultores maisienses, agrupados en 63 bases productivas, trabajan para hacer rendir nuevamente las tres mil 564 ha del cultivo dañadas por el meteoro.

 

Las acciones más importantes, por ahora, “se concentran en el acondicionamiento de los campos, sobre todo en la creación de sombras, con especial atención a las 263 ha de plantaciones en desarrollo (fomentos), que pueden dar producción a corto y mediano plazos; y salvarlas con acciones mínimas de resiembra”, dijo Isaac San Juan, director de la Empresa Agroforestal en el territorio.

 

Un programa de replantación previsto hasta 2019, precisó, “prevé renovar todas las áreas que el ciclón devastó, y de ellas, cultivar dos mil 600 para esa fecha”.

maisi viveros cafe2Leonel Pelegrín Ortiz, especialista en agrotecnia del café, informó que en 2018 se prevé la replantación de 800 ha, las cuales comenzarían a rendir fruto, si no hay contratiempos, en tres años, en tanto alcanzarán su máximo esplendor entre el sexto y el noveno año de vida.

“Lo primero es poner las semillas en las bolsas, que germinan en los meses de mayo, junio, julio y a partir de septiembre, octubre y noviembre del próximo año, comenzar a plantar”, explicó Leonel Pelegrín Ortiz, especialista en agrotecnia de los cultivos de café y cacao de la entidad.

 

Para la actual cosecha, por lo pronto, se calculan apenas 4 mil latas, una per cápita de 0,01 por hectárea, la más baja en muchos años.

 

“El beneficio húmedo de ese poquito de café se concentrará en la despulpadora de Santa Martha, en tanto para el beneficio seco se empleará el centro ubicado en Caleta.

 

“De manera que, por ahora, no se puede hablar de resultados en materia de producción”, apuntó el director.

 

No obstante, puntualizó, “está totalmente recuperada la infraestructura de las siete despulpadoras del municipio”.

 

Contrastes

 

Visto el panorama, en zonas como Vertientes y Sabana, algunos campesinos decidieron sembrar malanga en áreas tradicionalmente destinadas al aromático grano.

 

Así se aprovechan los terrenos, y de paso, se crean sombras para las plantas emergentes, en momentos en que la incidencia directa del sol y la falta de herbicidas propician que la maleza inunde los campos.

 

“No hay químicos -reconoció el técnico- y las ocho toneladas que se le habían otorgado a Maisí ahora hay que dividirlas, después de que el huracán Irma afectara la agricultura en todo el país.

 

“Ello dificulta el trabajo, porque cuando se terminan de limpiar los cafetales a machete por un lado, por el otro están nuevamente enyerbados”.

 

Aunque haya poco resultado en los primeros tiempos, los productores agradecen la ayuda brindada por el Estado como parte del proceso de recuperación, consistente en el otorgamiento de créditos, la renegociación y aplazamiento de las deudas, así como bonificaciones y rebajas en los precios de los insumos.

 

Luces

 

Claro que, si de esfuerzos se trata, merecen especial reconocimiento los 23 trabajadores del vivero de Santa Martha, pertenecientes al Centro de Gestión agrícola de Los Llanos, quienes de sol a sol laboran en el llenado de las bolsas de nylon destinadas al programa de resiembra.

 

En un mes, asegura Yudnovis Navarro Cantillo, jefe del mencionado Centro de Gestión, se llenan 50 mil.

 

A ese ritmo, en un año, deben producirse medio millón de posturas de café necesarias para poblar las 850 ha que cubre esta unidad productiva, y apoyar la demanda de otros caficultores.

 

“Estamos trabajando en la producción de posturas del tipo arábigo, con el objetivo de renovar todas las áreas. De ellas, 250 mil mediante injerto, tecnología que se usa por primera vez en Maisí, de manera experimental, asesorados por especialistas del municipio Tercer Frente, en Santiago de Cuba”, anunció el administrativo.

maisi viveros cafe3En el vivero de Santa Marta se monta un área de cultivo protegido, provista de sombra artificial, sistema de riego de agua por aspersión y equipamiento para el suministro de fertilizantes de manera localizada para la producción de posturas en sistemas de tubetes.

La especie resultante, de mayor calidad, es fruto de la combinación entre patrones de arábigo y robusta, aprovechando de este último las raíces, por ser más resistentes a plagas y enfermedades, especialmente el nemátodo, una larva existente en el suelo del territorio que provoca afectaciones al sistema radicular de la planta.

 

Para asumir el proceso de modernización, detalló Alexei Leyva Marzo, jefe del vivero, se ejecuta allí “la construcción de la casa de sustrato, donde se prepara el suelo con la materia orgánica para el llenado de los tubetes, y la de cultivo protegido, un área provista de sombra artificial, sistema de riego de agua por aspersión y equipamiento para el suministro de fertilizantes de manera localizada”.

 

“Esa tecnología humaniza y agiliza el trabajo -resaltó- pues los obreros no tienen que permanecer doblados para llenar los depósitos. En el mismo tiempo que se siembran 20 nylon, se llenan 100 tubetes, más o menos dos bandejas (que admiten 54 cada una), y se emplea menos cantidad de suelo.

maisi viveros cafe4Yudnovis Navarro Cantillo, jefe del Centro de Gestión de Los Llanos muestra un tubete, recipiente pequeño en forma de cono y material plástico, con una capacidad 83 cm cúbicos de tierra y vida útil de 10 años.

“En el organopónico tenemos 250 mil tubetes, conos plásticos con una capacidad de 83 cm cúbicos de tierra y tienen una vida útil de 10 años”, precisó.

 

“También -concluyó- hay ventajas para el productor, quien recibe las posturas en un tubete listas para sembrar”.

 

De concluirse en diciembre, el vivero tecnificado debe acelerar la primera parte de la venidera campaña de siembra cafetalera –sentenció Navarro Cantillo- un proceso que contribuye a mejorar los rendimientos productivos de todo el municipio.

 

La inversión, quizás, traiga buenas nuevas en materia de calidad y cantidad de las producciones del grano. Por lo pronto, hay que esperar por el natural proceso de desarrollo de las plantaciones.

 

Claro que si las labores de preparación de la tierra, siembra de sombras y cuidado de los fomentos marchan según lo previsto, ello debe contribuir a mejorar los resultados productivos y posicionar nuevamente a los cafetales maisienses entre los más reconocidos de Cuba.