La provincia de Guantánamo cerró el 2017 con un índice de boscosidad del 50.38 por ciento, el mayor del país, no obstante los estragos ocasionados a la floresta por el huracán Matthew.
El liderazgo del territorio está avalado por las 306 mil 101 hectáreas cubiertas de árboles, de las cuales 257 mil 465 corresponden a bosques naturales y 48 mil 636 a plantaciones realizadas por el hombre.
Escenarios principales de reforestación lo constituyen las cuencas hidrográficas, sobre todo las de interés nacional Guantánamo-Guaso y Toa; otros sitios donde se requiere la protección de las aguas y los suelos, y donde es necesaria la formación del bosque en interés de la defensa. En la provincia se incentiva la reforestación con especies de valor económico como cedro, caoba, baría, majagua, najesí, ocuje y guayacán. También destaca la plantación de frutales.
El protagonismo en tan vital tarea corresponde a las empresas forestales, las agropecuarias militares, para la Protección de la Flora y la Fauna, el Ejército Juvenil del Trabajo, el Ministerio de Ciencia Tecnología y Medio Ambiente (Citma), Azcuba, las cooperativas y los usufructuarios.
Después de Guantánamo se ubican Pinar del Río (47.36 por ciento), Matanzas (39.37) y Holguín (38.69). El municipio de Isla de la Juventud presenta un 69.3.
Cuba cerró el 2017 con un índice de boscosidad de 31. 23 por ciento, lo que la consolida como cumplidora de los compromisos contraídos en la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro, en 1992.
En ese encuentro el país se comprometió alcanzar en el 2015 un índice de boscosidad de 29.3 por ciento, el cual fue logrado antes de esa fecha gracias a la sostenibilidad de la política de reforestación emprendida por la Revolución.
El patrimonio forestal cubano supera ligeramente los 4 millones de hectáreas, de las cuales 3 millones 242 027 están cubiertas de bosques, informó Luis Manuel Gómez Pérez, especialista de la Dirección Forestal, Flora y Fauna Silvestre del Ministerio de la Agricultura.
Expresó el experto en silvicultura que en 2017 la nación incrementó ligeramente sus bosques (0.08 por ciento), no obstante los estragos causados a la floresta por el huracán Irma en varias provincias.
