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innovadores hospital generalLa recuperación de un equipo multifuncional Hércules permitió la ejercitación a pacientes con lesiones en el sistema osteomiarticular.

El incesante movimiento innovador en el hospital general docente Doctor Agostinho Neto, de Guantánamo, demuestra que el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos a Cuba jamás doblegará la voluntad de galenos, especialistas, técnicos y obreros para mantener activos los servicios de Salud en esa institución.

Once trabajadores y cuatro Comités de Innovadores y Racionalizadores (CIR) del mayor centro asistencial de la provincia merecieron recientemente la condición 8 de Octubre, máxima distinción otorgada por la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores (Anir) en el país, y 15 recibieron el premio Trinchera de Acero (Vanguardia provincial).

 

Cada año,  los aniristas de la institución ahorran a la economía del país recursos financieros estimados en más de 600 mil pesos, resultados que avalan el potencial de un movimiento que integra en siete CIR a más de 200 personas dedicadas a la búsqueda de soluciones efectivas a diversas problemáticas para sustituir importaciones.

 

Mantenimiento, Consulta Externa y Electromedicina son los Comités que despuntan en el aporte de sus miembros a la sostenibilidad de las tecnologías médicas que benefician a miles de guantanameros.

 

Recuperar, reparar, solucionar con inventivas

 

Durante más de 30 años, el uso intensivo de decenas de componentes mecánicos y electrónicos en el hospital provincial trajo consigo el deterioro y obsolescencia en herramientas y dispositivos que garantizan servicios asistenciales.

 

“Las únicas opciones posibles fueron recuperar, reparar, solucionar con inventivas y, sobre todo, con mucha voluntad”, explicó el ingeniero Efrén Denis Muria, especialista en inversiones que acumula largos años de experiencia como innovador enfrascado en la búsqueda de propuestas económicas para un país limitado en recursos financieros como el nuestro.

 

Ingresó a la Anir en 1983, y desde entonces pertenece al CIR de Mantenimiento. “Aquí trabajamos de forma mancomunada, en base a un plan temático derivado del banco de problemas del hospital.

 

“Entre los resultados más relevantes del colectivo figuran la recuperación de un destilador eléctrico de agua y la instalación de un sistema de alarma de fallo a tierra para el banco de transformadores de la línea central, la cual protege a las personas de las descargas eléctricas durante el paso de ciclones.

 

“También diseñamos un sistema de alarma acústico y sonoro para la protección del Laboratorio de Reactivos Nucleares, local requerido de seguridad en su funcionamiento. Con esa inventiva evitamos la suspensión del servicio a los pacientes por esa situación.

 

“El Excímer Láser, equipo usado en cirugía refractiva para la corrección de miopía, hipermetropía
y astigmatismo, tenía fallas con el control de la humedad relativa en el sistema. Con esfuerzo propio lo recuperamos a partir de la confección de un sistema que usa una tarjeta universal, a la cual se le agregó un circuito electrónico para el control de los parámetros requeridos.

 

“Aportamos en total más de treinta innovaciones”, subraya Denis Muria, quien ostenta premios en trabajos como la fabricación de electrodos de soldar, el diseño y construcción del molino de cemento romano, y el montaje de fábrica de cerámica ornamental.

innovadores hospital general2Los aniristas del hospital diseñaron y construyeron una estera mecánica en la que se ejercitan pacientes con afecciones cardiovasculares.

Novedades en el CIR de Consulta externa

 

Los servicios de Estomatología experimentan notable recuperación gracias al aporte de los aniristas. “En el país existe déficit de instrumentales por su alta carestía en el mercado mundial. Por esa razón, adaptamos útiles ociosos para usarlos en otros tratamientos bucales”, argumentó la Licenciada Lays Elizabeth Rojas Quijano, integrante del CIR de Consulta Externa.

 

“Entre ellos –añadió- figuran el espaciador de conductos para el procedimiento de endodoncia, la espátula cera-lecrón para el diseño de prótesis, y la confección de las uñas de Moore o raspadores utilizados para la retirada del sarro supra e infra gingival de las caras libres de los dientes anteriores.

 

“Esta innovación tiene un valor económico calculado en 25 mil 643 pesos cubanos. El efecto social también es considerable pues garantizan 7 mil 940 consultas mensuales.

 

“También trabajamos en la recuperación de jeringas para carpules (cartuchos o ampollas de anestesia) y fabricamos conos de papel para depositar amalgama u obturación recuperados, destacó Rojas Quijano.

 

En alta la medicina física y la rehabilitación

 

Quienes transiten por el ala Norte del segundo piso del hospital general docente, pueden apreciar pequeños salones de Medicina Física y Rehabilitación donde el especialista Pedro Pablo Gómez Matos devuelve a muchos pacientes las funciones perdidas por lesiones y enfermedades cardiovasculares.

 

Explicó el innovador que “aquí los módulos tienen largos años de explotación, carentes de piezas de repuestos. Mantenerlos funcionando garantiza ahorros al presupuesto del hospital y divisas al país. Durante los últimos 10 años recuperamos 15 equipos que se usan diariamente por unos 30 pacientes.

 

“Para dar respuesta al programa de rehabilitación de mujeres afectadas por operaciones de cáncer de mama, elaboramos tableros didácticos para motivar el levantamiento del brazo, con buenos resultados hasta el momento.

 

“Teníamos dos mesas universales españolas para ejercicios en el tren superior, propuestas a baja por pudrición en la superficie de madera, debido a la humedad. Planteamos nuestra negativa a la dirección del centro y buscamos tubos metálicos y un tapiz de acero níquel para unificar ambos muebles en uno solo, al que agregamos otros accesorios.

 

“Con los equipos en alta los pacientes alcanzan el máximo de rehabilitación de acuerdo con su discapacidad, y logramos insertarlos plenamente a la sociedad.

 

“A la bicicleta mecánica para pacientes infartados se le adaptó un sillín y así mantenemos en funcionamiento el gimnasio para atender a personas con afecciones cardiovasculares.

 

“Por los resultados en el diseño y recuperación de los equipos, y los efectos y beneficios económicos y sociales en los pacientes, merecimos el Premio Citma 2016”, destaca Gómez Matos.

innovadores hospital general3Adaptación y montaje de un brazo fijo para atender a personas afectados en sus miembros superiores.

Electromedicina siempre en acción

 

Gerardo Heredia Rivera es miembro del CIR de Electromedicina y atesora una extensa experiencia laboral de 51 años de trabajo como fundador de las Brigadas Técnicas Juveniles y la Anir.

 

Nuestro entrevistado enunció que “se logró poner en funcionamiento una camilla para el traslado de pacientes graves con diversas patologías, equipada con aspiradora y ventilador respiratorio pulmonar, pues se le acopló un balón de oxígeno.

 

“El citado mueble –asegura- se usa en el traslado de personas en estado crítico desde el Salón de operaciones hasta la sala de terapia Intensiva, o también hacia el local donde está el tomógrafo. En estos momentos construimos una segunda camilla para apoyar el servicio de cuidados intermedios. No tenemos referencia de que existan artificios similares en otros hospitales del país.

 

“Asimismo rescatamos un sillón estomatológico Probamat (de fabricación alemana) propuesto a baja por más de 30 años de uso. Se le colocó un nuevo circuito eléctrico y se repararon las piezas hidráulicas para realizar operaciones maxilofaciales. Su precio el mercado mundial está valorado entre los 6 mil y 8 mil dólares.

 

“Adaptamos la herramienta especial flumeter (medidor de flujo), escasa en el hospital, que garantiza acoplamiento en la oxigenoterapia. También construimos un troquel para producir juntas empleadas en la toma de gases medicinales como el oxígeno, nitrógeno, dióxido de carbono… para evitar su escape hacia la atmosfera”, detalla Heredia Rivera.