chofer contra la COVID 19 1Iroelkis Rodríguez MatosEs casi lo mismo: el ómnibus Diana 14-07-02, el timón, la carretera, un punto de llegada y otro de destino, el horario, las señales horizontales, verticales y de todos los colores. Su puesto y el de los transportados…, pero no es exactamente igual.

No lo es desde hace mucho, cuando se declaró a la provincia de Guantánamo en fase de transmisión autóctona. Pero para Iroelkis Rodríguez Matos -37 años- el cambio definitivo fue hace dos meses, cuando llegaron peticiones de refuerzo desde la cabecera provincial a la Empresa de Transporte de San Antonio del Sur.

Ahora mismo no recuerda si levantó la mano o lo señalaron con el dedo. “La cosa es que aquí estoy, transportando, sobre todo, personas que salen de alta de los centros de aislamiento de la ciudad de Guantánamo hacia sus casas, a cualquier hora del día y de la noche, en todos los municipios”.

Lo que tarda en contar es lo esporádico. Cinco días recogiendo personas positivas al nuevo coronavirus, “de todas las razas, género y edad, desde uno o dos porchofer contra la COVID 19 3 casa, hasta familias y cuadras enteras”, llevando muestras para las pruebas de PCR, a los médicos relacionados con la tercera fase del ensayo clínico de Abdala…

“Hago lo que me mandan -me dice y señala a su compañera de turno- porque cada guagua lleva, además del chofer, un estomatólogo que se encarga de recibir las orientaciones, coordinar con los centros de aislamiento y de guiarme por esta ciudad a la cual, de tanto recorrerla, ya casi conozco”.

Y lo hace sin sustos. “Antes de entrar al vehículo lo fumigan, y cuando lo entrego, lo vuelven a rociar con hipoclorito de sodio. Tengo mi pomo para las manos a la entrada, y normas dentro de la guagua para que todo transcurra sin problemas… Cuando transporté positivos, fue sin miedo, porque me dieron de todo: careta, sobrebata, guantes…”

Otro tuviera miedo. Es normal. Es un virus que puede provocar la muerte, dejar secuelas…, lo provoco o eso intento. Iroelkis se ríe, dice que es posible, pero no es de asustarse mucho, ni de enfermarse, y que en estas semanas de trabajo -desde hace más de 20 días, sin relevo- “ni catarro me ha dado”.

Tampoco hay temor por la familia que, momentáneamente, deja atrás. “Mi esposa y mis dos hijos no salen de la casa, y en Los Siguatos -donde vive- hasta donde sé no hay casos positivos a la enfermedad. En general, por allá las medidas se cumplen con bastante rigor”.

La aseveración guarda una crítica que no pone remilgos en explicar. “Yo estoy en la calle y veo de todo. Me impresiona la gente que sale por gusto a cualquier cosa, los niños jugando en las cuadras…, como si todo este esfuerzo fuera por gusto, como si no pasara nada”.

Indago cómo lo ha tratado la ciudad y dice sentirse complacido. “Tengo un cuarto cómodo en la Villa Deportiva, y me ha ganado un buen grupo de estomatólogos que considero amigos, además del reconocimiento y buen trato de la Dirección provincial y municipal de Salud”.

Preocupaciones, solo por su salario. “Porque estoy ganando casi el básico, aunque he hecho tantos viajes que, aunque quisiera, no podría contar y el trabajo, además de un poco arriesgado, es bien demandante…, pero eso ya se revolverá, de momento hay que cumplir, y se cumple”.

En ese hacer ha visto de todo, aunque habla sin el deje del protagonista. “Yo manejo y escucho. A los más sociables, les digo que se cuiden para no volverlos a ver, pero por lo general solo oigo las historias de las personas, la contentura con que regresan a sus casas y, por lo menos en la mayoría, agradecimiento e intenciones de no volver”.

¿Qué pasará después? ¿Si le piden regresar a Guantánamo cuando por fin llegue el relevo, lo haría? ¿Cuánto lo ha cambiado esta experiencia?, le suelto en carretilla.

“Después, si hay que regresar a la cabecera a apoyar la transportación, regreso, porque hay que trabajar y es necesario…, y cuando se acabe la pandemia, espero volver a mi ruta Guantánamo-San Antonio del Sur, mi recorrido habitual”.

Cuando regrese la normalidad, asegura, será el Iroelkis de siempre. “Quizás más consciente del esfuerzo que se hace en este país por la salud, y definitivamente con más de una historia que contar”.

chofer contra la COVID 19 2

Escribir un comentario


Código de seguridad
Refescar

feed-image RSS