hospitalLa terminación en octubre de la reparación capital de los salones quirúrgicos del hospital “Doctor Agostinho Neto”, de esta ciudad, obra de incuestionable prioridad para los servicios médicos de la provincia de Guantánamo, depende hoy, según el criterio de los inversionistas, del estable suministro de los materiales.

Es la primera vez en 33 años se repara la vital área hospitalaria, sometida a un cronograma constructivo en tres etapas que en octubre prevé la terminación de los ocho salones quirúrgicos con sus cubículos post operatorios y complementarios, comentó Luis Michel Valera, ingeniero a cargo de la obra como inversionista principal.

Entre noviembre y diciembre se repararían los cuatro salones de parto y dos de cesáreas, y finalmente la central de esterilización; trabajos que en general incluyen impermeabilización de cubiertas, sustitución de falso techo, puertas y redes hidrosanitarias, además de inversiones eléctricas, de iluminación y climatización, entre otros.

Michel Valera señaló como “frenos actuales” al ritmo de ejecución, los incumplimientos de los suministradores, entre ellos Escambray con los elementos hidrosanitarios, Muebles Imperio con la entrega de las puertas, y Valbo, por retrasos con la carpintería de aluminio a falta de cristalería.

El inversionista subrayó la importancia de mejorar los suministros para dar continuidad a objetos de obra sin detener el avance físico, y subrayó, a manera de ejemplo que la entrega de la carpintería de aluminio, aún sin cristales, posibilitaría avanzar en albañilería; mientras disponer de los elementos hidrosanitarios daría paso al empotramiento y revestimiento de paredes.

Interrogados al respecto Rubert Rodríguez, director de Escambray, y Alejandro Soto Agüero, especialista de Gestión Tecnológica en Muebles Imperio, hicieron descargo de tales señalamientos y apuntaron a su vez problemas organizativos de los inversionistas, tras los cuales subyacen, en sus opiniones los atrasos ejecutivos.

Rodríguez aseguró que la falta de recursos a pie de obra es problema interno de Salud, y aseguró que la casi totalidad de elementos fueron suministrados a los almacenes de servicio, sin embargo –dijo- no tienen claridad de los renglones de que disponen en su sector.

Soto Agüero, por su parte, señaló como ejemplo negativo la morosidad en la firma de contratos por parte del hospital (desde enero lo hicieron en mayo) lo cual imposibilitó la adquisición a tiempo las materias primas para la fabricación de la totalidad de las puertas, las que bien pudieran ya estar en su poder, aseveró.

El contrato es imprescindible a tenor con el Lineamiento 112 aprobado por el VI Congreso del Partido Comunista de Cuba, que lo define como “…herramienta de trabajo en la planificación y control de todas las etapas del proceso inversionista”, asegurando su resultado final con calidad y dentro de los plazos previstos en el cronograma de ejecución.

El representante de Muebles Imperio comentó que hoy las disponibilidades de formica para recubrir puertas y el pegamento de contacto son insuficientes por la lentitud en la rúbrica contractual, a pesar de lo cual buscan alternativas, terminaron las 48 puertas sencillas y se concluyen las primeras 10 de doble hoja, faltando 33 que no tenían porque depender de pegamento ahora.

Más allá de verdades y verdades, la trascendencia medico- asistencial de la obra impone a cada parte, organización y disciplina; entregarse a fondo para cumplir los contenidos, armonizar acciones y exigir a los 24 constructores el aprovechamiento óptimo de la jornada laboral, cabo suelto al amparo de la “falta de materiales y contenido de labor.”.

Junio marcó el cierre de los quirófanos del “Agostinho Neto”, donde se practica más del 80 por ciento de las intervenciones quirúrgicas del territorio, las cuales se garantizan hoy en espacios alternativos que no reúnen todas las condiciones para el desempeño de los cirujanos.

Cirujanos, anestesiólogos e integrantes de los equipos quirúrgicos comprenden la necesidad del “cierre” y asumen el reto de prestar servicio quirúrgico de calidad desde condiciones anómalas, pero solicitan de los constructores, inversionistas, y suministradores, el máximo empeño para minimizar el tiempo de afectación.

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