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En medio de la contingencia energética, que afronta el país, debido a la postergación de los mantenimientos de las centrales termoeléctricas (CTE) y las dificultades financieras para importar sus componentes impuestas por el bloqueo de Estados Unidos, una valiosa contribución aporta en su recuperación la Fábrica de Producciones Mecánicas Palma, de Santiago de Cuba.

Perteneciente a la Empresa de Servicios Técnicos Industriales (ZETI), del Grupo Azucarero Azcuba y radicada en la ciudad santiaguera, desde su surgimiento la planta ha sido decisiva en las reparaciones previas a la zafra de numerosos ingenios, y en los últimos 15 años es cada vez mayor  el vínculo con la Unión Eléctrica Nacional en el alistamiento de sus termoeléctricas.

Según su director, Ricardo Ramírez Garrido, con la paulatina entrada de recursos, entre los que resultan indispensables tolas y planchas de acero de diferente espesor, comenzó la fabricación de dos calentadores de aire regenerativo (CAR) para el mantenimiento general a que será sometida la unidad 2, de la cte Lidio Ramón Pérez, de Felton, en la provincia de Holguín.

Además, para la termoeléctrica Ernesto Che Guevara, de Santa Cruz del Norte, en Mayabeque, se producen 15 juntas de expansión, utilizadas en los conductores de gases, mientras que a la central Antonio Maceo «Renté», de Santiago de Cuba, fueron entregadas las carcasas para los ventiladores de tiro inducido y se dispondrán otros elementos por el experimentado colectivo.

Para la Unión Nacional Eléctrica, estos talleres han acometido otros  componentes de varias toneladas de peso y dimensiones que en no pocos casos imponen trasladarse en sesiones por vía férrea, cuyo monto millonario en caso de ser contratados en el extranjero puede reducirse aquí por concepto de sustitución de importación  hasta en más de un 70 %.

Ramírez Garrido precisó a Granma que estos trabajos no afectan el compromiso con la industria azucarera, que entre el gran volumen demandado para la venidera contienda incluye 12 rotores de ventiladores de tiro inducido y cinco ventiladores de tiro forzado para calderas, 35 ventiladores de centros de acopio y cuatro para centrífugas de azúcar, entre otras piezas.