Blonde, la película norteamericana que aborda (o más bien recrea) la vida de Marilyn Monroe y en la que trabaja como protagonista la actriz cubana Ana Celia de Armas Caso, será estrenada este viernes y sábado en la tanda de las 6:00 pm en el Cine Huambo, de Guantánamo.

La cinta, que ya ha sido visualizada en La Habana con gran aceptación del público, es dirigida por el director australiano Andrew Dominik y tras su debut en la edición 79 del Festival Internacional de Cine de Venecia se ganó 14 minutos de aplausos en ese evento. También se agenció los elogios de la crítica en el Festival de San Sebastián, en el que se resaltó el desempeño de la intérprete principal.

El argumento de Blonde está basado en la obra homónima de Joyce Carol Oates, que deviene un repaso en clave de ficción sobre la vida de Monroe para mostrar los estragos de la fama en la vida de las personas. No obstante, vale aclarar en ese sentido, que el audiovisual está lejos de ser una biografía, pues especula sobre hechos que no están probados, de ahí que sea considerada una reinvención que busca polemizar sobre la violencia de Hollywood.

Según los especialistas, pese a los cuestionamientos al guion, De Armas cumplió con su rol de manera magistral en las casi tres horas que dura el filme, al asumir los distintos papeles interpretados por Monroe y llevar a escena con gran realismo los problemas existenciales y personales de la actriz, aquejada por las dificultades derivadas del machismo predominante en aquella época.

Ana de Armas, radicada en España, ha sido en los últimos años de los personajes cubanos más seguidos en redes sociales, dada su participación en filmes como Cuchillos por la espalda, con la que fue nominada a un Globo de Oro; Blade Runner 2049, Sin tiempo para morir (la nueva película de James Bond) y The Gray Man, donde sobresalieron las dotes histriónicas de la joven de 34 años, nacida en La Habana el 30 de abril de 1988.

La Escuela Nacional de Teatro de Cuba tuvo el privilegio de contar a sus catorce años con Ana de Armas, cuyo primer éxito cinematográfico vino con el filme Una rosa de Francia, que protagonizó junto a Álex González, con solo 16 años de edad. Más tarde actuó en otras películas como Madrigal y el telefilm El Edén perdido.