Este carnaval será fruto de la creatividad y la voluntad de hacer.Guantánamo marca temprano este año los compases de su fiesta mayor. Todavía faltan semanas, pero el intendente del municipio, Alexander Cala Rodríguez, ya afina al detalle el programa y los aseguramientos del Carnaval de Guantánamo 2025, previsto oficialmente del 14 al 17 de agosto.
“Será más colorido que los anteriores, aun con las limitaciones económicas que todos conocemos; hemos buscado variantes para transformar la situación del municipio y garantizar la alegría popular”, asegura convencido.
“El corazón musical latirá con propuestas de lujo. Entre las orquestas nacionales confirmadas figuran Elito Revé y su Charangón, JG, la Original de Manzanillo y Cándido Fabré, a las que se suman las locales Orquesta de Baracoa, El Ruso y su Banda, la Sabor y Ritmo, Bryan Omega...
“Son agrupaciones que garantizan la mezcla de tradición y modernidad que caracteriza a nuestra provincia”, precisa Cala, subrayando que el objetivo es “acompañar el disfrute de los guantanameros” durante las cuatro noches principales del festejo.
“Para lograr que la música encuentre espacio, la ciudad se dividirá en siete áreas:
La Plaza Pedro Agustín Pérez, donde se concentrarán los hitos masivos; la Plaza 28 de Septiembre (popularmente conocida como Polvo en el Viento), la Plaza de la Juventud, en el Caribe, la Plaza del Reparto Obrero, la Plaza Elio Revé en la Loma del Chivo, y el área beisbolera de San Justo.
“Además cada recinto contará con el respaldo de actores de los once municipios y de las empresas estatales, agrícolas e industriales”, explica Cala.
“Más allá de los epicentros musicales, Guantánamo resucita este año su Área de las Tradiciones, ubicada en el patio de la Escuela de Economía. Allí confluirán proyectos de gestión no estatal, empresas del comercio y trabajadores por cuenta propia comprometidos con ofrecer platos típicos, artesanías y demostraciones de danzas afrocubanas.
“El objetivo es que ese espacio vuelva a ser referencia de identidad local y que los guantanameros tengan otra alternativa de disfrute”, detalla el funcionario, convencido de que sin raíces no hay carnaval que valga.
El público infantil tendrá, como siempre, sus ofertas en la calle Beneficencia y actividades en la Plaza 24 de Febrero. Además, el 10 de agosto se celebrará el Carnavalito, con juegos, opciones ampliadas de picnic y un espectáculo cultural y deportivo animado por artistas locales.
“Ese día los niños serán los protagonistas: vestiremos de gala el Parque de Diversiones y pondremos todas las áreas al servicio de las familias”, subraya Cala, quien insiste en que la fiesta “empieza por los más pequeños y se extiende al resto de la sociedad”.
Financiar semejante agenda exige imaginación. El Intendente revela una estrategia centrada en ingresos por distintos medios: venta de pan a tarifa diferencial, contribución de transportistas arrendados, colocación mayorista de cerveza y refrescos, y aportes de industrias locales —cervecería, cárnico, lácteo, conservas Guaso y la fábrica de tabacos—, que entregarán parte de sus utilidades generadas durante la temporada.
“La meta es sostener la fiesta sin disparar los precios; los recursos que se aporten antes y durante el carnaval se revertirán en seguridad, logística y servicios”, puntualiza.
Uno de los temas más sensibles es la cerveza. Cala promete que la bebida dispensada mantendrá un precio “al alcance de la población, casi similar al del año pasado, porque el carnaval debe ser inclusivo; no se trata de que lo disfrute solo quien tiene más dinero”. Para ello, productores como la distribuidora de la marca Parranda, venderán a granel con un margen limitado, y se vigilará que no haya abusos especulativos.
La ciudad empezará a calentarse incluso antes de la fecha oficial. A partir del 5 de agosto se habilitarán expendios y carpas en las calles aledañas a Carlos Manuel; y el 4 de agosto, se sumará el municipio a la tradicional Jornada de la Canción Política —este año dedicado al trovador Eduardo Sosa— lo que marcará simbólicamente el arranque de la temporada festiva.
“Queremos que la música popular y la trova dialoguen, para que agosto sea una gran sinfonía donde todos encuentren su espacio”, subraya el Intendente.
Mientras conversamos, la Plaza Pedro Agustín Pérez ya ensaya sus primeras luces y los barrios afinan congas y comparsas.
Cala concluye con un gesto que combina orgullo y cautela: “Nos queda hacer realidad todo lo planificado, garantizar la tranquilidad ciudadana y demostrar que, aun con recursos limitados, Guantánamo sabe organizar su carnaval”.