El equipo femenino de Guantánamo alcanzó la medalla de plata por segunda ocasión consecutiva en la Liga Superior de Baloncesto, luego de caer tres juegos por uno ante el quinteto de Santiago de Cuba, en la sala polivalente Alejandro Urgellés, de la Ciudad Héroe.
Las guantanameras cayeron en el primer juego de la final y ganaron el segundo, ambos efectuados en la sala polivalente Rafael Castiello, de la urbe del Guaso.
En igualdad de condiciones los elencos retomaron las acciones en la sala polivalente santiaguera. Allí las visitantes no la tuvieron fácil, pues además de jugar con la tropa incompleta -varias atletas titulares intervienen en el Campeonato Nacional Juvenil en Pinar del Río- enfrentaron dificultades con el hospedaje, el cual carecía de condiciones básicas para el alojamiento.
Por otra parte, el colectivo técnico más oriental alegó favoritismo hacia las locales por parte de la referee principal Dailenis Savigne, quien es santiaguera.
La falta de un sitio web oficial en el que se actualicen las estadísticas y se ofrezca información oportuna sobre los partidos, la poca asistencia de público en los inicios del certamen y el mal estado constructivo de las sedes, son aspectos críticos a mejorar, para que la lid principal del deporte ráfaga sea, al menos, digna.
Para las alumnas de Adrián Laffita Malé, la medalla igual tiene sabor dorado, ganada a fuerza de talento, pues desde el mismo inicio de los entrenamientos tuvieron que sortear no pocos avatares.
La ausencia de jugadoras clave obligó a los entrenadores a reestructurar el equipo, apoyado básicamente en atletas de la categoría juvenil.
El equipo femenino de baloncesto de Guantánamo es una muestra de que cuando hay talento y compromiso se obtienen resultados, por lo que ahora se vuelve necesario el reconocimiento y la motivación a atletas y entrenadores.
