Con la llegada de los años 2000 y como parte de la renovación generacional un grupo de boxeadores en Guantánamo comenzó a destacarse en los torneos domésticos de principios del nuevo siglo, que marcarían la continuidad de la armada más oriental.
Luego del auge y consagración de exponentes como Diógenes Luna, Humberto Savigne, Osvaldo Castillo, Leónidas Lafargue y Josué Caraballo, por citar ejemplos, debutaron estrellas de la talla de Yuriolkis Gamboa, quien se tituló en su presentación de la edición del año 2000, celebrada en la urbe del Guaso.
El aporte de Gamboa a la Guerrilla del Guaso durante su paso por la selección nacional fue considerable, desde su primera presea dorada en 2000, obtuvo tres títulos más (Holguín 2003; Camagüey 2004 y Granma 2006), así como dos premios plateados (Sancti Spíritus 2001 y Las Tunas 2002).
Su coequipero Erislandy Lara también fue muy efectivo al acumular tres reinados (Pinar del Río 2005; Granma 2006 y Sancti Spíritus 2007), un subtítulo (Camagüey 2004) y un bronce (Holguín 2003).
Otros que a principios de los 2000 marcaron huella durante su paso por las lides cubanas fueron Iván Oñate, Yislán Barrera, Yoelkis Labañino e Irán Pérez.
Oñate, junto a Marcos Forestal y Yunior Echavarría, sorprendieron en casa en el año 2009 al titularse en sus respectivas divisiones, para contribuir al tercer puesto de la sede, donde la descalificación de Erislandy Savón impidió que el campeón mundial juvenil de México 2008 aportara un título más a su representación.
Fue aquel el desarrollo de una fructífera etapa para Oñate, tres veces monarca (Holguín 2008; Guantánamo 2009 y Sancti Spíritus 2012), subtitular en Sancti Spíritus 2007 y bronce en Granma 2006.
Hacer este análisis sin reseñar la contundente victoria de la Guerrilla del Guaso en Pinar del Río 2013 sería imperdonable. En esa cita la tropa de Víctor Sánchez Matos, entonces técnico principal de los del Guaso, terminó invicta, con 261 puntos y amplia ventaja sobre los locales (223), quienes culminaron segundos.
Los próximos guerrilleros más sobresalientes que tuvo la agrupación guantanamera fueron Erislandy Savón y Arlen López, sin embargo, como siempre, la provincia más oriental tuvo segundas y terceras figuras en la Escuela Nacional de Boxeo entre los que destacan hasta hoy Jorge Moirán, Geovis Salfrán y Rafael Joubert, los dos últimos por primera vez convertidos en reyes de los 52 y 60 kilogramos, respectivamente, en la 60 edición del Playa Girón, en enero de este año, en Sancti Spíritus.
Por su calidad, la valía de los atletas con perspectiva inmediata también han aportado a los resultados de la provincia a mediano y largo plazo, al evolucionar, crecer y llegar a formar parte de los Domadores de Cuba.
Llegó la hora para las chicas
Al cierre de 2022 se aprobó en la Mayor de las Antillas el boxeo femenino, tras lo cual no pocas peleadoras le dieron un giro a sus carreras deportivas al abandonar las disciplinas que por años practicaron e iniciar un camino desconocido, pero retador y apasionante para ellas, bajo el amparo del Índer y de la Federación Cubana de ese deporte.
Guantánamo, tierra fértil de pugilistas de excelente calidad técnica, hizo historia al presentar en un cartel de exhibición, el 16 de diciembre de 2022, donde Reynabell Grant (50 kg), Julianne Díaz (54 kg), Lianet Gómez (60 kg), Arianne Imbert (66 kg) y Yaquelín Estornell (75 kg), fueron incluidas en la selección nacional.
Imbert y Estornell se convirtieron en las primeras guantanameras medallistas en un evento internacional de boxeo, cuando en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador, se adjudicaron el bronce.
La otrora librista multimedallista Centroamericana y Panamericana, se convirtió en la primera mujer de este territorio con un título nacional -66 kg-, en la primera edición del Campeonato Nacional Femenino de Boxeo, en enero último.
Arianne Imbert (66) y Julianne Díaz (60) quedaron terceras, fue entonces de una presea de oro y dos de bronce la cosecha para la representación guantanamera en esa lid.
Los resultados aquí mencionados se deben en gran medida al éxito de grandes entrenadores a quienes les ha caracterizado una entrega incondicional a sus atletas. La presencia de los técnicos Rolando Acebal y Víctor Sánchez Matos en el colectivo técnico de los Domadores de Cuba, el más alto nivel del pugilismo cubano, es muestra de ello.