Yunior Yuri jugó 15 de los 16 partidos disputados por el Deportivo Achuapa en el más reciente torneo de la Liga Mayor de Guatemala, todos como titular. En dichos encuentros aportó 2 goles a la causa de su club.
Yunior Yuri Pérez es de esos deportistas que se sienten agradecidos con la vida, pues tal como él lo reconoce, y aunque le faltan muchos campos por andar, ya siente que hizo el “golazo del siglo”, calificativo que usa para referirse al fichaje que tiene desde el 2022 con el Deportivo Achuapa, de la Primera División de la Liga de Guatemala.
Desde el 6 de junio de este año Yunior se incorporó a la selección cubana de fútbol -de la que ha sido parte en todas las últimas convocatorias- en las labores de eliminatorias mundialistas de la Confederación del Norte, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (Concacaf), en busca de un boleto a la cita del orbe, la cual se celebrará en varias ciudades de México, Estados Unidos y Canadá, durante el verano de 2026.
El polivalente futbolista destaca entre el listado de los 23 jugadores presentado por el técnico Yunielis Castillo para los primeros encuentros de la clasificatoria mundialista, razón que nos lleva a una comunicación virtual para conocer más del ídolo de los jóvenes apasionados por el deporte rey en Caimanera.
¿Cómo ha sido tu experiencia jugando en el extranjero?
Jugar 15 partidos en el año a nivel profesional, sin dudas marca un antes y un después, las experiencias son infinitas y eso se ve en la cancha día a día, además en la selección profesional la preparación mental y física es bien importante, pero la mental te da el plus, porque te ayuda a levantarte cuando cometes un error, y eso es elemental para enfocarte en lo que quieres y no decaer.
¿Qué sientes cuando regresas a jugar con la selección nacional?
Es un orgullo para mí vestir la camiseta de la selección cubana, muchos sueñan con hacerlo y no hay mejor manera de lograrlo que jugando fútbol, algo que me emociona por la dinámica de partido que se hace en Cuba: vistoso, rápido y fuerte, tres elementos que caracterizan a los jugadores cubanos.
A ello le sumo también la alegría que se siente en volver a jugar con mis compañeros, compartir con ellos mis mismas costumbres, tradiciones, algo que se añora cuando estás fuera de Cuba.
Me siento en condiciones para asumir la sincronía que necesita la oncena tras sus miembros jugar en ligas diferentes. Debo cambiar el chip para jugar en otras posiciones, aunque confieso que lo que más me gusta es la media cancha, ya sea pivote o volante ofensivo. En cualquier posición me siento feliz, porque jugar al fútbol es lo mío y siempre que sea para ayudar, donde me den el chance, ahí estoy.
¿Puedes definir tu estilo de juego?
Defino mi estilo de juego como sencillo, me enfoco en hacerlo simple, en uno o dos toques, siempre apoyando cuando tengo jugador libre, cumpliendo esa función de recuperar pelotas y entregarlas siempre, porque así le aporto mucho al equipo, el juego fluye más de esa manera.
En Guatemala, Cuba, o donde quiera que juegue Yunior Yuri, las expectativas siempre son las mismas, donde los profesores me asignen hacer lo mejor, creo que al final somos equipos y si cada uno aporta su granito de arena ayuda al logro de buenos resultados.
Ahora mismo eres un ídolo entre los jóvenes que le gusta en el fútbol en Caimanera, ¿qué mensaje le darías a los que sueñan con seguir tus pasos?
Que sigan adelante, que luchen por sus sueños ya sea si quieren ser médico, deportista o cualquier otra profesión, porque más allá del dinero, creo que se trata de esa satisfacción personal de saber que lo vas logrando. Les digo que luchen trabajen, eso sí, deben esforzarse mucho para llegar al más alto nivel, que es de sacrificio, pero luego tienen su recompensa.