El Ministerio Público Federal brasileño advirtió al presidente Jair Bolsonaro que puede ser objeto de alguna «punición» por hacer una apología del golpe militar, cuyo aniversario será recordado el 31 de marzo.
El excapitán del Ejército electo presidente en los comicios de octubre pasado determinó que las Fuerzas Armadas realicen actos conmemoratorios del derrocamiento del gobierno constitucional ocurrido el 31 de marzo de 1964.
«Festejar la dictadura es festejar un régimen inconstitucional responsable de graves crímenes y violaciones de los derechos humanos», señaló en una nota la Procuraduría Federal de Derechos Humanos, organismo vinculado al Ministerio Público.
La conmemoración del Golpe en unidades de las Fuerzas Armadas fue prohibida años atrás.Realizar actos que reivindican la destitución del presidente electo Joao Goulart es algo que «suena a una apología de las atrocidades» cometidas durante el régimen que gobernó entre 1964 y 1985, observó la Procuraduría.
Finalmente, el comunicado precisó que la exaltación a través de la «máquina pública» de un gobierno que violó la Constitución puede ser motivo de «puniciones» al presidente Bolsonaro, dado que caracteriza el delito de «improbidad administrativa».