El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reafirmó este miércoles que había causado la caída del avión comercial ruso en el desierto de Sinaí en Egipto el pasado sábado, que acabó con la vida de 224 personas.
El grupo yihadista reivindicó también un atentado suicida cometido el miércoles con coche bomba en Al Arich, en el Sinaí, en el que murieron tres policías.
“No tenemos ninguna obligación de explicar cómo se estrelló”, afirma un miembro del EI que no se identificó en un mensaje audio publicado en la cuenta Twitter habitual de la organización.
El brazo egipcio del EI, Provincia del Sinaí, había anunciado el sábado mediante Twitter que “derribó”, sin precisar cómo, el Airbus A321-200 de la compañía chárter rusa Metrojet.
El miércoles un kamikaze hizo estallar el coche que conducía delante de un club policial en Al Arich, en la provincia del Sinaí del Norte, donde el ejército combate al EI y donde el Airbus ruso se estrelló el sábado.
El atentado fue cometido por un kamikaze en represalia al “arresto de mujeres beduinas por las fuerzas apóstatas” en la región, afirmó la reivindicación.
Las autoridades egipcias y rusas esperan que el análisis en curso de las dos cajas negras del avión, una que conserva los sonidos y las conversaciones y la otra con los parámetros del vuelo, permita resolver el enigma de la catástrofe.
El análisis podría determinar si el Airbus A321 de la compañía rusa Metrojet fue víctima de un accidente o de un atentado, como lo afirma la rama egipcia del Estado Islámico (EI), que el sábado dijo que lo “había hecho caer”.
El atentado del miércoles fue el primero que cometió el grupo yihadista en el Sinaí después de la caída del avión.
El miércoles el presidente egipcio Abdel Fatah al Sisi partió de El Cairo rumbo a Londres, donde efectuará una visita oficial de tres días, indicó la agencia Mena.
Antes del viaje, Al Sisi habló por teléfono con el primer ministro británico David Cameron con quien convino en la necesidad de “garantizar una seguridad más estricta” en el aeropuerto de Sharm el Sheij, de donde había despegado el avión ruso, indicó Londres.
Ese aeropuerto recibe cada día a miles de turistas que vienen a pasar las vacaciones a orillas del Mar Rojo.
En declaraciones a medios de prensa británicos, el presidente egipcio dijo que se necesita tiempo para determinar las causas del accidente y, al mismo tiempo, descartó por considerarla “especulaciones sin fundamento”, la idea de que se trate de un atentado de EI.