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El béisbol en Cuba no anda bien. Los resultados fuera de fronteras de la selección nacional son el principal ejemplo, pero también la pérdida de calidad de nuestras series, con su repercusión en la asistencia de público a los estadios -que solo cambia de acuerdo con la etapa de la lid y el estado del equipo local.

Tenemos deudas en el trabajo en la base, la captación, la formación, la legalidad y la atención a los atletas, entrenadores y eventos, por solo mencionar algunos de los que brotan en cada debate.

En esta misma página hemos opinado del tema tras regresar cabizbajos de eventos internacionales o cuando nos toca mirar con lupa el desarrollo de la principal campaña de casa, pero a cada interrogante a lo largo de los años la respuesta no se ha concretado en acciones efectivas y, mientras, la herida sigue sin cicatrizar.

Desde el año pasado, en la Comisión nacional se ha visto cierto movimiento para salir del “hueco”, con algunos pasos como el proceso de consulta popular para obtener propuestas con “los pies en la tierra” que ayuden al perfeccionamiento del béisbol casero o la estructura de la venidera Serie, mejor en papel -falta ver qué tal en la práctica- que la de los últimos años, en la cual los peloteros y la afición de más de medio país se quedaban inactivos tras solo 45 choques.

En mi consideración, la acción que puede tener mayor impacto y que de aplicarse bien y ser efectiva debe ayudar a cambiarle a largo plazo la cara a nuestra pelota, es el programa de desarrollo de talentos para identificar a los peloteros con mejores condiciones en el país y lograr que lleguen al máximo de su potencial.

Foto 1“El pelotero cubano llega con muchas deficiencias a la Serie Nacional y “madura” tarde. El proyecto de desarrollo de talentos aspira a cambiar esa realidad”, afirma el profesor Fránger Reynaldo. En reciente visita a Guantánamo, el MSc. Fránger Reynaldo Balbuena, uno de los responsables del proyecto, explicó que aspiran a adelantar la edad promedio con que un pelotero en Cuba llega a la cumbre de su desarrollo -en la Mayor de las Antillas es de 29 o 30 años, cuando en el mundo se comporta de 25 a 26-, lo que significa superar antes las deficiencias técnicas, tácticas y físicas, que solo se logra actuando desde edades más tempranas.

Muy viejo es el imperativo de salir a buscar con mayor profundidad, desde las categorías inferiores, a atletas con potencialidades e influir en su preparación para que lleguen a ser peloteros completos, y creo que el programa responde a eso, pues tiene tres etapas en plazos: largo (abre con atletas de ocho a 10 años a nivel de áreas y escuelas deportivas), mediano (incluye a juveniles y menores de 23 años) y corto (ya en categoría mayor y que necesitan pulirse con urgencia para llegar a la máxima calidad).

Se abrió por el plazo pequeño, el que apura. Para arrancar, entre propuestas de la Comisión nacional y los territorios se identificó y anunció en total a 116 jugadores que forman parte del proyecto, los cuales tendrán tres controles     –uno antes de iniciar la Serie, otro sobre el juego 45 y el último al terminar- y recibirán asesoramiento para perfeccionar sus habilidades de alrededor de una veintena de glorias deportivas, según pasen por las diferentes provincias, como parte del calendario de la campaña y de acuerdo con la posición en que se desempeñan y sus potencialidades.

El team de asesores lo integran ex peloteros que llegaron al máximo de talento –entre tantos nombres ilustres, se encuentran Ariel Pestano, Germán Mesa, Rogelio García, Adiel Palma, Orestes Kindelán, Antonio Muñoz, Pedro José Rodríguez y Luis Giraldo Casanova- y que por su experiencia brindan una oportunidad única para que los jóvenes aprendan directamente “de la mata” y tomen de cada uno los consejos que más se acomoden a su estilo y condiciones.

Tras terminar la 60 Serie, por el resultado en los controles y las propuestas de los asesores se seleccionarán a los 40 mejores de los 116 jóvenes, quienes se concentrarán, tendrán una preparación intensiva y serán cantera directa para los equipos nacionales y contrataciones internacionales –claro, el listado es abierto y se ratificará cada año, lo que posibilita que otros puedan hacer el grado de acuerdo con el rendimiento.

Recorrer el listado de talentos en desarrollo permite mirar parte de lo mejor que tenemos en el béisbol cubano dentro de frontera y también ver los territorios que mejor están formando.

En el caso de Guantánamo, la provincia de menor representación -en concordancia con sus resultados integrales en este deporte-, en un primer momento fueron incluidos los lanzadores Yeudis Reyes Gamboa (de Manuel Tames y con 25 años), Dayron Mena Silot (de Imías y con 19) y Alexander Valiente Rodríguez (de Guantánamo y con 19).

Ahora se suma al grupo de desarrollo de menores de 25 años el jardinero Luis Jairo Hechevarría Lores (de Guantánamo y con 21) y se agregan al piquete especial (de 26 a 27 años) los también patrulleros Over Cremé Planas (de Manuel Tames y con 26) y Yoel Darce Herrera (procedente de Camagüey, con 26 y que además juega la primera base).

Llama la atención que, al interior de la provincia, también se movieron los resortes de la inercia en la búsqueda de talentos y se organiza un grupo de cinco especialistas que saldrán a recorrer los llanos y montañas para encontrar a jóvenes con aptitudes naturales para el béisbol y traerlos para formarlos en la Academia provincial –donde se les dejarán alrededor de 15 de los 32 cupos de dicha unidad docente.

En otros momentos se han implementado proyectos y medidas que, al final, terminaron sin resultado, pero creo que si logramos dar con acierto y constancia los actuales y los muchísimos pasos necesarios que faltan, aún con las salidas de peloteros a otros lares y teniendo en cuenta nuestras restricciones económicas y materiales, podremos emprender el camino nada corto y fácil, para cambiarle la cara al principal pasatiempo cubano.

La preselección de los Indios de vuelta al Van Troi

Foto 2La preselección de donde saldrán los Indios ya anda de regreso a los entrenamientos en el Van TroiLa preselección de 39 peloteros de donde saldrá el equipo que representará a Guantánamo en la 60 Serie Nacional de Béisbol regresó a los entrenamientos en el estadio Van Troi desde el sábado primero de agosto.

El grupo, bajo la guía de un colectivo técnico dirigido por Agustín Lescaille López, tras ser sometido a la prueba de PCR en tiempo real y dar todos sus integrantes negativo, cumple un plan de seis semanas de entrenamiento y en esta primera ha trabajado en la adaptación a la carga, en la parte física y la técnica, y ya en la próxima comenzará a jugar.

“De acuerdo con el diseño trazado se trabaja en tratar de superar las deficiencias en el orden táctico y de preparar al pitcheo para un temporada donde se jugarán 75 partidos.

“Además, desde la Universidad de Guantánamo estamos recibiendo servicios especializados de biomecánica para tratar desde la ciencia de mejorar la postura, técnica y mecánica de lanzamiento de los pitchers”, afirmó Jorge Rubén Prevot Sánchez, jefe técnico de la Comisión provincial de este deporte.

Los integrantes de la preselección se incorporaron al concentrado tras un período en el que debido a la pandemia de la COVID-19 tuvieron que entrenar desde sus hogares siguiendo un plan individual del colectivo técnico, que los supervisó en la distancia apoyado por entrenadores de los municipios de origen de los deportistas –todos menos Maisí y Baracoa.

La nómina de los Indios del Guaso se dará a conocer el 17 próximo y la 60 Serie se prevé inicie el 12 de septiembre, con algunas restricciones que garanticen el aislamiento físico en los estadios y el cumplimiento de las medidas de la fase de la etapa pos-COVID-19 en que se encuentre el territorio sede de la subserie.