La confirmación de 13 enfermos con la COVID-19 ayer, según el parte del Ministerio de Salud Pública, indica que aunque cuando disminuye el número de casos positivos reportados por día, la provincia de Guantánamo debe continuar cumpliendo con rigor las medidas de aislamiento y protección para evitar retrocesos en el actual contexto epidemiológico.
Los diagnosticados pertenecían en su mayoría (11) al municipio de Guantánamo, que continúa con la situación más alarmante, dada la dispersión de casos existentes en la ciudad. De Baracoa y de El Salvador se informó un infectado y ambos territorios deben velar también el control sanitario sobre los contactos de confirmados y sospechosos para reducir vulnerabilidades.
En terapia intensiva ahora permanecen tres personas, una ciudadana de 79 años de El Turey, Baracoa, con antecedentes patológicos de Hipertensión Arterial, Cardiopatía Isquémica, Enfermedad Cerebrovascular Isquémica, Demencia senil y Postrada; una señora de 43 años con Retraso Mental Severo y un señor de 72 años con antecedentes de Hipertensión arterial y Retraso mental ligero.
El doctor Francisco Durán García, director de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública, llamó la atención a la familia para que extreme los cuidados sobre los menores de 18 años, pues hoy se reportaron en el país 98 niños, adolescentes y jóvenes con el nuevo coronavirus, de los cuales tres eran lactantes. Alertó que si bien más del 80 por ciento de los contagiados se recuperan, sí suelen desarrollar complicaciones, como ha sido el caso de una adolescente que desde el lunes se reporta grave, bajo estricta observación.
Llama la atención que desde el primero de marzo hasta la fecha ya suman mil 16 los pacientes pediátricos confirmados, y la mayor incidencia está entre los 15 y 18 años, lo que indica cierto descuido por parte de los mayores a la hora de velar porque sus hijos no se expongan al patógeno.
En lo que va de mes se reportan 7 mil 789 positivos y se lamentan 33 fallecidos, por lo que las autoridades insisten en que no debemos dejar toda la solución a la vacuna, se necesita aumentar la percepción de riesgo y la responsabilidad ciudadana para vencer en esta batalla por la vida.