Ante el alza de positivos en los últimos 14 días, 2 mil 155 autóctonos, y una tasa de incidencia de 426.2 por cada 100 mil habitantes, en reunión del Grupo Temporal de trabajo para la prevención y control del nuevo coronavirus en Guantánamo, Emilio Matos Mosqueda, gobernador, insistió en que la principal fórmula para ganar la batalla contra la COVID-19 está en el trabajo mancomunado desde las Áreas de Salud, con el barrio y las instituciones del territorio.

“Aún detectamos pacientes con síntomas que no han sido atendidos por el médico o enfermera de la familia, y las pesquisas siguen siendo superficiales”, apuntó el dirigente, quien alertó sobre el incremento de casos sin fuente de infección específica (165), lo que habla de una peligrosa dispersión del virus.

La circulación de la variante Ómicron, junto a otras enfermedades respiratorias, y la aún insuficiente percepción de riesgo en la población condicionan la aparición de 163 controles de foco, donde están pendientes de estudio más de 3 mil 932 guantanameros, por ser contactos de positivos.

De los diagnosticados con el SARS-COV-2, 961 permanecen ingresados en las instituciones de Salud del territorio (uno grave), por poseer patologías o riesgos que los hacen vulnerables. De hecho, se han confirmado 227 pacientes pediátricos, y están bajo observación unas 40 gestantes y cuatro puérperas.

Todos los municipios, excepto Niceto Pérez, muestran indicadores de alta transmisibilidad del nuevo coronavirus.

Llaman la atención por infecciones recientes: Baracoa, con 780 casos; Caimanera, con 64; Yateras, con 146; Maisí, con 211 y San Antonio del Sur, con 140. Los dos primeros municipios incumplen con el avance de la vacunación a la población con las tres dosis de Abdala, y bien sabido es el peligro que significa no estar inmunizado en medio de la tensa situación que vive el país. Debe ser interés de todos inyectarse de inmediato.

Como parte de la estrategia de control a la pandemia, y también para asegurar la continuidad del curso escolar sin exponer a los estudiantes, se mantiene la vigilancia en centros educativos; como resultado de ello, se han diagnosticado 29 alumnos con COVID-19, 23 sospechosos, y mil 418 con síntomas catarrales, situación ante la cual se aísla a los pacientes (hay unos 314 en cuarentena) y se mantiene el resto del colectivo en observación.

Se insiste en la necesidad de cumplir el llamado de las autoridades a la autoconciencia y observación de los protocolos para prevenir la infección con el patógeno.

Hoy suman en el territorio 390 guantanameros llegados del exterior (potenciales portadores y propagadores de la enfermedad), 296 de ellos, en el municipio de Guantánamo.