Nuevamente el compromiso con la Patria reúne hoy a guantanameros en el Mausoleo del Mambisado, en La Confianza, lugar histórico donde el 24 de febrero de 1895, Pedro Agustín Pérez, junto a otros independentistas, levantó el acta de constancia del alzamiento con el que abrían la nueva contienda organizada por José Martí desde el exterior para librar al archipiélago cubano del yugo español: la Guerra Necesaria.
La consigna de ¡Viva Cuba Libre! se enarboló en Guantánamo entonces y se repetirá ahora por las nuevas generaciones, que lo hacen desde la convicción de que el sueño de libertad de aquellos en el siglo XIX es una realidad desde el Primero de enero de 1959, cuando triunfó la Revolución de y por los humildes comandada por otro grande: nuestro Fidel Castro, siguiendo las ideas martianas.
No solo La Confianza será testigo del homenaje del pueblo en esta jornada. Hoy también habrá acción en recuerdo de los hechos ocurridos aquel 24 de febrero en Santa Cecilia bajo la guía de Pedro Ramos y Enrique Brooks.
En ambos espacios se reafirmará el orgullo local por los patriotas que lograron que Guantánamo fuera el lugar donde tuvieran mayor altura los resultados de los alzamientos con los que abrió la Guerra del 95.
No solo La Confianza y Santa Cecilia se movieron en el territorio extremo oriental en aquella jornada; también lo hicieron, por ejemplo, Boca de Jaibo, El Toro y Morrillo Chico, en este último donde se realizó el ataque y toma del fuerte español de San Nicolás, choque armado primado de la nueva gesta y donde los patriotas alcanzaron un motivador éxito, comandados por Enrique Tudela García.
Estudiar tales hechos históricos es un reto para los niños y jóvenes del Alto Oriente cubano hoy, quienes deben encontrar inspiración permanente en lo ocurrido en La Confianza, Morrillo Chico o Santa Cecilia, para enfrentar las actuales amenazas a la Patria.
Vivimos en tiempos duros, llenos de retos, y por ello se acrecienta la necesidad de no dejar entrar la desmemoria, de no olvidar las motivaciones y ejemplos profundos que impulsan al proceso revolucionario cubano, que ha sido uno solo y pone al ser humano como hermano de sus iguales en el centro.