La Empresa Pesquera de Guantánamo, PESCAGUAN, cerró el pasado año con un crecimiento de las producciones, sobre todo de alimentos conformados, impulsado por mejoras en la industria y la autogestión de materias primas, insuficiente sin embargo para cumplir el plan de producción física.
En general, pesaron los bajos niveles de captura, sobre todo en la actividad de alevinaje que entregó a la industria apenas 226 toneladas, y debería ser la principal fuente de pescado del territorio, ante los aportes regularmente discretos de la pesca en plataforma.
Armando Posada Lóriga, Presidente del Grupo Empresarial de la Industria Pesquera, señaló como deficiencia fundamental la tardanza en la recuperación de las embarcaciones, pues solo están activas 15 de las 40 disponibles, a pesar de la entrega de motores y otras reparaciones.
Valoró también como demorados, los trabajos para la recuperación de los bancos de reproductores para garantizar la demanda de alevines con vistas a la próxima campaña de siembra, y especialmente las alternativas para mejorar la calidad del agua en los tanques de incubación.
“Lo más importante es producir alimentos para el pueblo y a eso deben ir los esfuerzos. Se invirtió en la industria, pero hay que lograr que se produzca a máxima capacidad…, hay que ponerle recursos a los alevines, porque es lo que nos da estabilidad”, precisó.
Sobre la angula, el principal renglón exportable de la industria local y por tanto de sus ingresos en divisas, el titular instó a garantizar todo lo necesario para garantizar los procesos de ese rubro, incluidas las certificaciones para acceder a nuevos mercados.
Entre las potencialidades, se señalaron la búsqueda de nuevos productos y las actividades secundarias relacionadas con servicios de transportación a terceros y la gestión de paquetería, las cuales contribuyeron al sobrecumplimiento de los ingresos y las utilidades.
Por su parte, Yarima Betal Márquez, directora de PESCAGUAN, aseguró que se crean condiciones para un año superior, y se avanza en inversiones para incrementar las áreas para la producción de alevines, a pesar de los atrasos por las limitaciones de combustible.