Las casas deben entregarse a mediados de diciembre.
Yaimara Jiménez de Castro Londres no es una joven impaciente. Más bien, se caracteriza por su calma. La misma que logró ayudarla a preservar la vida en aquellas horas terribles cuando el huracán Óscar destruyó su casa.
Yaimara es una mujer de fe. Por eso, aunque por estos días vive temporalmente en Guantánamo, lejos de su hogar, siempre que puede vuelve a su natal San Antonio del Sur, y con un termo de café, té, o agua en manos visita a los hombres y mujeres que en el poblado de Buena Vista trabajan hace meses para construirle su nueva casa en el primer asentamiento creado como parte de la estrategia de desarrollo local para el 2030.
"Ella tiene dos niños, y actualmente está alquilada en la ciudad del Guaso, pero no ve la hora de volver aquí, y entrar a su nuevo hogar que tendrá la particularidad de ser de los primeros conformados a partir de contenedores, una alternativa que promete resolverle la vida a mucha gente con problemas de vivienda", afirma Mariela Londres Díaz, madre de Yaimara.
"Estamos muy conformes con esta propuesta porque peor es no tener nada y aunque el país vive tiempos difíciles hace este esfuerzo por nosotros, así que se agradece, además no es fácil vivir en un alquiler aunque sea de apenas dos mil pesos. La casa nueva será un cambio radical, porque la antigua era de madera, y aunque el contenedor es más pequeño, al menos luce seguro y confortable. Esperamos que todo termine lo más pronto posible", dice Londres Díaz.
Como Mariela y Yaimara, otras familias aguardan por el cumplimiento de las prometidas casas-contenedores. Es el caso de Virgen Guibert Ortiz y Lina Ortiz-Mezón, hija y madre, también.
Virgen explica que ella también es una de las afectadas del huracán Oscar y está agradecida por todo lo que tras su paso se hizo por ella. Ahora más todavía al saber que pronto tendrá casa y moderna, a partir de la transformación de los contenedores. Nos han enseñado los planos, con todas las cosas que lleva: el baño, los cuartos, la cocina, y luce muy confortable.
“Somos seis, y la verdad que vamos a estar apretados ahí, pero veremos qué pasa, ahora mismo nuestra mayor necesidad es tener un techo y un hogar nuestro.
“Nosotros vivíamos en Pan de Azúcar en una vivienda tres cuartos amplios, grandes, de mampostería y zinc. Y cuando pasó Óscar, el deslizamiento de la loma y la crecida del río acabaron con todo. Nos quedamos sin nada, entonces nos dieron una carpa, donde estuvimos todo este tiempo y ahora estamos a la espera de la casa.
Lina Ortiz, la madre de Virgen, agrega por su parte, sentirse encantada con el nuevo barrio al que se mudarán.
"Allí arriba estaremos seguros del río y del deslizamiento de tierra, además, lo conocemos bien y a toda su gente. Seríamos los primeros habitantes de esa zona en desarrollo y nos dicen que llevará acera, jardineras, calles... lo mejor es que casi Pan de Azúcar completo se traslada para allá, así que todos somos conocidos.
"Por eso cuando la gente cuestiona sobre por qué mudarse para los contenedores, que si el clima permitirá vivir en ellos…y otras especulaciones más, nosotros no les hacemos caso. Porque ¿qué saben ellos, si nunca han experimentado esa experiencia? Cuando estemos ahí adentro diremos la última palabra, pero hasta ahora nos parece una maravillosa propuesta", asegura Lina.
El estado de la obra
Por el momento se avanza en las instalaciones internas y divisiones.La voluntad de ayudar, de no dejar a nadie desamparado es lo que prima en esta inventiva estatal, una idea compleja, costosa (porque requiere insumos eléctricos, hidráulicos, mobiliario...) pero necesaria para resolver parte de los problemas de la vivienda en la provincia, especialmente de los damnificados de fenómenos climatológicos como el huracán Óscar y el más reciente Melissa.
Ennis Crespo Rodríguez, directora municipal de Vivienda, detalla y explica que este asentamiento piloto representa una alternativa viable en un contexto donde se requieren soluciones rápidas, resistentes y adaptadas a las condiciones geográficas de los municipios.
Las casas contenedores aportan ventajas desde el punto de vista constructivo y permiten concentrar recursos sin depender totalmente de los sistemas tradicionales”.
Según la funcionaria, el trabajo que se desarrolla en Buenavista implica la articulación constante de varias instituciones: la Empresa de la Construcción, Mueble Imperio, la Empresa de Fundición de Válvulas y Bombas Industriales Mayor General Carlos Roloff (Valvo), las direcciones municipal y provincial de Vivienda, además del acompañamiento técnico de la empresa de Diseño e Ingeniería Guantánamo (Génedis), adscrita al OSDE Diseño, del Ministerio de la Construcción.
“Cada fase —desde el montaje de las estructuras hasta la urbanización exterior— se valida con los especialistas responsables para garantizar la calidad de la obra.
Brigadas de varios municipios colaboran para terminar con prontitud la obra.“Aunque se trata de una iniciativa novedosa para el territorio, el proceso se ejecuta con orden y consulta permanente. Las brigadas provinciales y de municipios como Yateras, Imias y Baracoa han asumido jornadas extendidas, y las empresas involucradas mantienen presencia estable en el lugar para garantizar continuidad”, significa la directora.
Señala que ya se concluyeron los portales, avanzan los revestimientos interiores y se trabaja simultáneamente en divisiones, instalaciones eléctricas e hidráulicas, techos y urbanización.
Arnaldo Mugercia, director de la UEB Empresa de la Construcción San Antonio del Sur.Arnaldo Mugercia López, director de la UEB de Empresa de la Construcción San Antonio del Sur, asegura que el cronograma marcha con intensidad y disciplina técnica. Explica que se han completado 14 contenedores, el número 15 está en fase final de montaje, y varios presentan un avance significativo en la conformación de los muros, las partes húmedas y la infraestructura interior.
También informa que la llegada de materiales como las planchas de melamina, la carpintería y las tejas permite sostener el ritmo para entregar las viviendas en la fecha acordada.
Tanto Mugercia como la directora de Vivienda coinciden en que el asentamiento de Buenavista está concebido con condiciones integrales: acceso vial, aceras, áreas verdes, espacios para servicios básicos, un parque infantil y la posibilidad de ampliación futura para los beneficiarios.
Además, la zona se seleccionó por encontrarse fuera de riesgo con reserva de terreno para extender el proyecto hasta 2030.
Las autoridades precisan que las viviendas se entregarán bajo el sistema de reposición y que los beneficiarios pagarán a crédito, con precios subsidiados, tal como establece la política de la vivienda estatal.
Con la vista puesta en el 17 de diciembre, la Empresa de la Construcción, la Dirección Municipal de Vivienda y aliados continúan trabajando para cumplir el compromiso de entregar estas 15 viviendas que inauguran una modalidad constructiva emergente en la provincia.
Ambas instituciones consideran que el proyecto abre un camino para la implementación futura de soluciones similares en otros asentamientos, como parte de la estrategia territorial para enfrentar el déficit habitacional y garantizar alternativas seguras ante fenómenos climatológicos de alto impacto




