Frente del hotel Baracoa.
La invitación es a la mar, y a la brisa que se cuela por los amplios ventanales del hotel Baracoa, una instalación que pronto debe abrir sus puertas y convertirse en otra opción del turismo en la Primera Villa fundada en Cuba.
Tres pisos sobre el nivel del mar, literalmente. Asentadas sus bases en el corazón del malecón baracoense, el segundo más largo del país después del de La Habana, con sus dos kilómetros de longitud bañados por el Océano Atlántico.
Con categoría tres estrellas, la instalación dispone de 44 habitaciones dobles, tres con cama king size para luna de miel; todas con televisor, teléfono, minibar, servicio de agua fría y caliente, climatizadas, bellamente decoradas y ubicadas en el segundo y tercer nivel.
La planta baja acoge un pequeño lobby y servicios para el esparcimiento: bar-cafetería, restaurante con menú principalmente de comida típica de la localidad, sala de juegos con mesa de billar, cigarbar y una zona para consumir al aire libre.
La instalación incrementa a 210 las capacidades de hospedaje estatal para el turismo en esa urbe, donde hoy se explotan tres hostales e igual número de hoteles, todos pertenecientes a Villa Gaviota.
Desde los cimientos
Las labores constructivas del hotel Baracoa iniciaron a finales del 2014, a cargo de la Empresa Integral Constructiva Guantánamo, y posteriormente de la Unidad de Gestión Diseño y Construcción Número Uno Vértice Holguín, cuyos hombres ahora mismo trabajan en los detalles previos a su inauguración.
Para noviembre la oficina de reservaciones Cubatur ya vendió los servicios de la instalación a los primeros clientes extranjeros, afirmó Reider Toirac Milián, gerente del hotel.
Ana Kenia Muguercia Lores, ama de llaves, reconoce la calidad de las habitaciones y la belleza de los espacios, y asegura que la instalación tiene todas las condiciones para unas vacaciones tranquilas, y con servicios de calidad.
Serán 21 los trabajadores en las temporadas altas (del primero de julio al 31 de agosto y del 15 de diciembre al 15 de marzo), y 14 el resto del tiempo, personal ya garantizado, asevera Leudis Hinojosa Suárez, jefe de recursos humanos de la UEB Villa Gaviota Baracoa.
Vista del mar y el malecón desde el balcón de una de las habitaciones.
Hotel Baracoa: para disfrutar la naturaleza
Toirac Milián precisa que hasta el momento la intención es establecer precios de alojamiento similares a los de los hostales del municipio, y el paquete solo incluirá hospedaje y desayuno, aunque también habrá opciones de una tarifa fija para almuerzo y comida.
Además, desde el hotel podrá accederse a paseos fluviales por el río Toa y el Yumurí, los senderos del coco en la finca Duaba y del cacao en Rancho Toa, almuerzos en el campo, excursiones y otras opciones para estar en contacto con la naturaleza de la Ciudad Primada.
Lo principal, empero, es Baracoa. A la mano, una villa de más de medio siglo de historias, fortalezas antiguas, una naturaleza esplendorosa que lo circunda todo, tradiciones músico-danzarias autóctonas y todavía únicas, y un caudal de leyendas que matizan cada escenario de la ciudad más antigua de Cuba.