En la receta de hoy continuamos con el menú sin gluten, y esta vez vamos a ver cómo preparar una bechamel con todo el sabor pero sin nada de harina.
Además, como en este caso no es necesario tostar la harina en la mantequilla (como hacemos en la bechamel clásica) puedes prescindir totalmente de la mantequilla y conseguirás una bechamel super ligera y prácticamente igual de buena.
Te animo a que pruebes esta bechamel sin harina de trigo y apta para celíacos.
Ingredientes(para medio litro de bechamel):
- 1/2 litro de leche (500 ml)
- 35 gramos de maicena (almidón de maíz)
- 25 gramos de mantequilla sin sal
- 1/2 cucharada pequeña de sal fina
- una pizca de pimienta negra
- una pizca de nuez moscada molida
Preparación
- Pon en un cacerola (o cazo grande) 35 gramos de maicena, añade medio litro de leche fría y mezcla bien.
- Pon la cacerola a fuego medio y añade 25 gramos de mantequilla sin sal.
- Ahora tenemos que remover constantemente para evitar que se formen grumos mientras que la bechamel espesa.
- Cuando haya espesado aparta del fuego y añade media cucharada pequeña de sal fina, una pizca de pimienta negra y una pizca de nuez moscada.
- Mezcla bien y prueba de sal. Y eso es todo, ya puedes usar tu bechamel sin gluten en una lasaña o por ejemplo en las coliflores gratinadas.
Recomendaciones:
Si no tienes mantequilla sin sal puedes usar mantequilla con sal sin ningún problemas. Eso sí, no añadas la media cucharada de sal antes de probar la bechamel. Es mejor que compruebes el punto de sal y que ajustes luego con la cantidad necesaria.
Por cierto, es muy fácil pasarse con la nuez moscada y la pimienta así que ojo. Añade solo una pizca y luego rectifica.
Ten en cuenta que mientras preparas esta bechamel es muy fácil que se formen grumos si dejas de remover. De hecho al usar harina de maíz (en forma de almidón) se forman los grumos con mucha más rapidez que en la bechamel con trigo. Así que si te ocurre esto lo mejor es apartar la bechamel del fuego y añadir un poco de leche. Luego bates fuertemente hasta que se deshagan los grumos.
Si después de hacer lo anterior te siguen quedando grumos entonces deberás pasar la bechamel por un colador fino.
