El Consejo de Defensa Provincial de Guantánamo (CDP) exigió extremar las medidas de control sobre los viajeros nacionales en el actual contexto epidemiológico para reducir riesgos de rebrotes de la COVID-19, sobre todo ahora, que suman más de 748 los guantanameros en vigilancia, arribados de provincias con alta transmisión del nuevo coronavirus como La Habana, Santiago de Cuba, Granma y Matanzas.
Llama la atención que al cierre de hoy, estaban ingresados en centros de aislamiento de viajeros 48 ciudadanos, mientras 400 transeúntes provenientes de la capital cubana permanecen en observación desde sus hogares, lo que implica un mayor reto para la Atención Primaria de Salud y demanda mayor responsabilidad de la familia que debe velar por el cumplimiento de los protocolos sanitarios.
Rafael Pérez Fernández, presidente del CDP, llamó, además, a profundizar en las encuestas epidemiológicas para rastrear a contactos de positivos, para descartar que los sospechosos detectados en los próximos días (15 ayer del municipio cabecera), estén relacionados directa o indirectamente con pacientes confirmados previamente o con alguno de los 36 focos abiertos en las barriadas del Alto Oriente cubano.
Pérez Fernández alertó sobre el peligro de exceso de confianza ante la relativa disminución de infectados, 142 en los últimos 15 días, para una tasa de incidencia de la enfermedad de 28, 1. Aclaró que Guantánamo sigue siendo vulnerable al contagio por SarsCov-2, especialmente en la urbe del Guaso y Baracoa, que acumulan 110 y 20 infectados desde el pasado 30 de marzo hasta la fecha.
En estos momentos la provincia mantiene 35 guantanameros aún hospitalizados con el nuevo coronavirus (6 de ellos casos pediátricos), 406 contactos de positivos y 29 sospechosos con síntomas sugestivos de COVID-19. Hasta este miércoles se acumulaba 4 mil 244 confirmados con COVID-19 en el territorio. Se han procesado 71 mil 911 muestras para PCR en tiempo real y aplicado 26 mil 313 test rápidos en cuerpos de guardia, de los cuales 3 mil 381 fueron positivos.
