La aparición de cuatro casos con COVID-19 durante los últimos 15 días en Guantánamo cuya fuente de infección aún es desconocida, y la detención a diario de personas con síntomas sospechosos positivos al test rápido, llevó al Consejo de Defensa Provincial a exigir de inmediato la revisión de las estrategias municipales para enfrentar el nuevo coronavirus.
Según Roilder Romero Frometa, máximo representante de Salud en el Alto Oriente cubano, los epidemiólogos investigan exhaustivamente para determinar el origen de todos los contagiados en la provincia, donde se vigilan 30 controles de foco en las comunidades.
Alis Azhares Torreblanca, Vicegobernadora guantanamera, insistió en la importancia de la adecuada encuesta epidemiológica tanto a los confirmados como a los sospechosos, más cuando se mantienen en centros de aislamiento bajo observación 37 personas con síntomas sugestivos de COVID-19 y 406 contactos.
Los municipios con mayor vulnerabilidad siguen siendo Baracoa, con 19 positivos, y Guantánamo, con 105, en los últimos 15 días. En ambos se han adoptado medidas de restricción en cuadrantes dentro de las ciudades, donde se realizan estudios masivos de PCR en tiempo real para descartar la presencia del virus.
Si bien los indicadores epidemiológicos indican un relativo control de la situación sanitaria actual, las autoridades llaman a no disminuir la percepción de riesgo.
Las cifras de muestras procesadas para PCR del Alto Oriente cubano ascienden ya a 74 mil 431, de las que 4 mil 247 han sido positivas. Se mantienen ingresados 30 guantanameros. Además, han fallecido diez desde que inició la pandemia en marzo del 2020.
Los recuperados superan ya los 4 mil pacientes, sin embargo urge continuar cumpliendo las medidas de protección y ante cualquier indicio sospechoso acudir al médico para evitar complicaciones por la enfermedad.
