La mayoría de los privados de libertad en Cuba completaron, al igual que la mayor parte de la población del país, el esquema de vacunación previsto en la estrategia de enfrentamiento a la COVID-19, y comienza la aplicación de la dosis de refuerzo para preservar su salud y la de los combatientes que allí laboran.

A pesar de no haber estado exentos de los efectos de la pandemia, en especial en su momento de mayor incidencia en el país, los servicios médicos del Ministerio del Interior, junto a Salud Pública, lograron el control de la situación, a partir de la aplicación de rigurosos protocolos para la protección de los reclusos, según la nota publicada por el sitio web de la institución militar.

De acuerdo con las precisiones de la teniente coronel Sara Rubio Valdés, jefa del Departamento de la Dirección de Establecimientos Penitenciarios (DEP), el sistema se preparó para enfrentar el SARS-COV-2 en un escenario potencialmente complejo, lo cual posibilitó que durante los primeros seis meses de la pandemia no se registrara ningún caso en los centros de reclusión.

La información destaca la labor desarrollada por el Hospital Nacional de Reclusos (HNR) ubicado en áreas de la prisión Combinado del Este, la mayor instalación hospitalaria del sistema penitenciario en Cuba, donde, a pesar de producirse algunos contagios, logró controlarse la enfermedad sin que sucedieran hechos extraordinarios, a partir de las medidas tomadas para detener la transmisión.

Según el doctor Carlos Alberto Espinosa Carbonell, director del HNR, la estricta vigilancia en la entrada y salida al centro, así como las rigurosas medidas sanitarias aplicadas, con la participación consciente de los reclusos y de sus familiares, fueron elementos decisivos para que la pandemia no se saliera de control.

En estos momentos se prioriza, en todos los establecimientos, al igual que en todo el país, el completamiento de la vacunación, a la vez que se intensifica la aplicación de las vacunas de refuerzo como vía más eficaz para lograr el control de la enfermedad y de la variante Ómicron.

Tomado de Granma

Escribir un comentario


Código de seguridad
Refescar